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Bajo la sombra de Ayotzinapa, arranca la FIL en Guadalajara
Se rindió en aplausos ante la presencia del escritor Fernando del Paso y el italiano Claudio Magris, ganador del Premio FIL en Lenguas romances.
Guadalajara, Jal.- "Nos unimos al sufrimiento de los familiares y amigos de los estudiantes normalistas desaparecidos en Iguala y nos sumamos a la solicitud urgente de que se restituya el Estado de derecho en nuestro país", aseguró Raúl Padilla, presidente de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
Así, con la sombra del caso Atyotzinapa, arrancó el sábado la FIL de Guadalajara que en plena inauguración no evadió el tema que hoy cimbra al país.
"Mención al caso Ayotzinapa que tanto dolor e indignación ha generado ente los mexicanos, dolor, más allá de nuestras frontera y que ha revelado lo gravemente que la nación y el Estado mexicano se han visto afectados por el crimen organizado y son muchas las voces las que pide justicia a nuestras autoridad y la feria se une a esto", agregó Padilla.
El pronunciamiento desató aplausos y las siguientes participantes de los presentes no eludieron el tema e hicieron referencias a la violencia que azota a México.
El canciller argentino Héctor Timerman manifestó su solidaridad con lo estudiantes y dijo: "El gobierno mexicano hará todo lo posible por castigar a los culpables de este aberrante hecho".
Entre invitados especiales, funcionarios y una amplía delegación de escritores argentinos se dio por inaugurada la edición 28 de la FIL de Guadalajara, la cual se rindió en aplausos ante la presencia del escritor Fernando del Paso y el italiano Claudio Magris, ganador del Premio FIL en Lenguas romances.
"Mi profunda y conmovedora gratitud a todos", comentó en un español empapado de su acento italiano.
Pero el discurso de Magris le dio luz al reclamo por Ayotzinapa al mencionar que "escribir es también un intento de construir un Arca de Noé para salvar -todo lo que amamos, para salvar deseo vano e imposible quijotesco pero inextirpables- cada vida".
Y Magris se hundió en las profundidades de sus recuerdos, de su escritura, del color de su lápiz, de su libro Danubio para terminar preguntándose: "¿Por qué se escribe? Por tantas razones? por amor, por miedo, como protesta, para distraerse ante la imposibilidad de vivir, para exorcizar un vacío, para buscarle un sentido a la vida", lo que de inmediato atrapó al público ante la belleza de sus palabras.
Continuaron los discursos oficiales y así, Raúl Padilla terminó por dar la bienvenida a la FIL Guadalajara, "la celebración de las letras del mundo, la gran fiesta del libro, la cultura y el pensamiento".
vgutierrez@eleconomista.com.mx
Números
30 países participantes
650 autores.
74 millones de pesos la inversión
3,000 actividades
2,000 casas editoriales
440 mil títulos a la venta
4 mil millones de pesos la derrama económica en Guadalajara.