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Arte e Ideas

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Libros escritos por mujeres para leer en 2024 sin spoilers

A lo largo de la historia, las mujeres en la literatura —como en muchos otros ámbitos— han sido invisibilizadas y poco reconocidas, por eso, leer mujeres sí es revolucionario. Aquí una lista de cinco libros escritos por mujeres.

Ilustración: El Economista.

Leer a mujeres es revolucionario. Los programas de estudio de la educación básica, la media superior e incluso la superior están llenos de autores, de conferencistas e investigadores varones, no por ausencia de mujeres, sino por falta de visibilidad.

Como en las ciencias exactas, en los deportes o en la producción de conocimiento, las mujeres en la literatura han tenido que esforzarse mucho más que sus pares hombres para ser reconocidas. En mis primeros 18 años de vida leí a hombres casi con exclusividad, por eso, desde entonces me he propuesto leer a tantas mujeres como me sea posible.

Aquí una lista de libros escritos por mujeres que recomiendo para leer en 2024:

La Perra, Pilar Quintana

En sus 108 páginas, se vive de cerca la historia entre Damaris, una mujer negra y trabajadora del hogar que ha perdido muchas batallas en sus cuatro décadas de vida y Chiril, la cachorra que adoptó recién nacida. Una historia de fuerza y dignidad que ocurre en Juanchaco, región ubicada en el Pacífico colombiano que, aunque nunca has estado ahí, sientes que reconoces.

Entre las batallas perdidas, quizás la más grande, fue la de ser madre. Aunque Damaris ya tenía tres perros, adoptar a Chiril transformó su vida. La nombró así en honor a la hija que no pudo tener.

La autora revela detalles fundamentales y cruciales sobre la historia de Damaris con Chiril y el resto de su familia en cada línea. Una historia que no sólo te emociona y te desilusiona, sino que también refleja realidades de mujeres negras, rurales, indígenas o pobres en medio de sociedades que las excluyen, que las marginan o que nunca las miran.

Limpia, Alia Trabucco

Estela migró del sur de Chile a Santiago para trabajar limpiando la casa y cuidando de la menor de los integrantes de una familia con dinero; dedica casi todas las horas de todos sus días a este trabajo. Alerta desde las primeras líneas que en la familia que la emplea pasó algo: murió la niña.

En primera persona cuenta todo, se lo cuestiona todo, no encuentra respuestas, pero saca conclusiones. Estela percibe la precariedad laboral en la que trabaja y la desigualdad en esa casa y en la sociedad. No es sumisa, ni se conforma, está enojada, a veces desesperada, pero también siente amor e ilusión.

Esta novela muestra a una trabajadora del hogar más como persona que como mujer precarizada, y su realidad, que no deja de ser violenta, pero que se cuenta con dignidad. Y que refleja cómo desde este sector y muchos otros, la precariedad laboral es la norma.

Germinal, Tania Tagle

La maternidad también es monstruosa. Este ensayo está dividido en tres partes, que a su vez se componen de textos cortos. Advierto que leerlo siendo madre puede cambiar totalmente la perspectiva, yo no lo soy.

Desde una posición vulnerable y transparente la autora revela y expone todas las complejidades de la maternidad, desde enterarse del embarazo, comprobarlo, atenderlo, vivir un parto, hasta la nueva era, que consiste en seguir siendo, pero aprender a ser desde otra posición.

Se hace preguntas, se contesta, te alcanza, habla con su hijo, habla con pensadores de otros siglos. El embarazo es monstruoso y concibe al monstruo, asegura la autora, partiendo de pensar al monstruo como el otro, como lo ajeno, como lo que altera, pero que al mismo tiempo generará un asombro y un descubrimiento.

Malas Mujeres, María Hesse

“Ni locas, ni tontas, ni provocadoras, ni fatales. Mujeres”, dice la autora de este libro que está acompañado de ilustraciones preciosas. La historia la han escrito los hombres y se ha tomado mucho tiempo para ir encontrando, reconociendo y tomando como referencia a las mujeres.

Un mundo en el que la misoginia ha sido la norma, las injusticias cometidas contra mujeres, en todos los aspectos, son incontables. En este libro, la autora reivindica las historias y referencias de distintas mujeres que han existido, creado, soñado y contribuido a la sociedad. Además, expone y explica las estrategias patriarcales que han desacreditado, controlado y silenciado los discursos acerca de mujeres a las que se les estigmatizó y condenó.

Desde Juana “La Loca” hasta Amy Winhouse, la autora recupera y da voz a estas mujeres. Que un libro no alcanzaría para una lista completa, pero que es suficiente para reflexionar cómo la sociedad hereda un sistema que castiga de manera desproporcionada a las mujeres por casi todo.

Tiempo de cuidados, Victoria Camps

Nunca, como ahora, había quedado tan expuesto lo necesarios y valiosos que son los cuidados. La academia, los hacedores de política pública, las madres, las abuelas y las hermanas, las trabajadoras del hogar y los organismos de derechos humanos resaltan lo necesario que es redistribuir y revalorizar los cuidados.

Este texto tiene espíritu de poner estas necesidades que pronto se vuelven urgencias en el centro de todo. Invita a la reflexión sobre el cuidado desde una perspectiva de comunidad, pero también de responsabilidad individual y de empatía: todos necesitamos del cuidado.

Los cuidados, que son desproporcionadamente realizados por mujeres, deben repartirse igualitariamente entre ellas y sus pares hombres. Y el Estado debe garantizar, además, que existan condiciones dignas para cuidar.

ana.garcia@eleconomista.mx

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Economista por la Universidad Nacional Autónoma de México. Periodista especializada en género, derechos humanos, justicia social y desarrollo económico.

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