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América se aferra al título en su centenario

Luis Alfonso Sosa se mantuvo sereno la gran parte de los minutos del partido, con un rostro en paz, analítico, casi absorto por un ambiente que emanaba gritos y consignas de más de 80,000 gargantas.

Luis Alfonso Sosa se mantuvo sereno la gran parte de los minutos del partido, con un rostro en paz, analítico, casi absorto por un ambiente que emanaba gritos y consignas de más de 80,000 gargantas; incluso cuando el disparo de William Da Silva tomaba rumbo a la portería de Marcelo Barovero y significaba la eliminación de su equipo, el único técnico mexicano de los equipos semifinalistas seguía ensimismado, buscando una respuesta que le diera el pase a la final.

La Liga MX tendrá la versión finalista del Boxing Day, el tradicional día del futbol inglés en el cual se desarrollan los partidos de la Premier League apenas un par de días después de la Navidad. América venció 2-0 a Necaxa en el partido de vuelta de la semifinal, y con marcador global de 3 a 1; enfrentará a Tigres en la final del Apertura 2016, una serie que tendrá que esperar 18 días para el primer partido, después de que los azulcremas participen en el Mundial de Clubes.

La Volpe mantiene el invicto con América desde su llegada en la Jornada 11 del presente torneo así como esa personalidad pragmática en su juego, cuidadosa al atacar y muy ordenada para defender.

América fue precavido y ecuánime hasta el punto de mantener a Oribe Peralta con labores defensivas; sin embargo, esto tampoco significó un desbordamiento de los dirigidos por Luis Alfonso Sosa, quien contrastaba con el estilo histriónico de su contraparte, el argentino Ricardo Antonio La Volpe, y durante el primer tiempo esperó un ataque americanista para responder de la misma forma.

Fue entonces cuando los Rayos tuvieron el primer aviso, mediante un remate de cabeza que pegó en el poste y Moisés Muñoz controló el balón cuando no tenía un dueño definido. América continuó más precavido que altanero, hasta el punto en que, ya en la segunda parte, fueron los futbolistas de Necaxa quienes mostraron la valentía de ofender a su rival, y fue entonces cuando emergió la figura de Muñoz.

En dos ocasiones el portero que perderá la posición ante el fichaje de Agustín Marchesín se estiró para mantener limpia su portería. Fue justo en el momento cuando un gol dejaba sin final a América, pero para esos momentos respondió Moisés Muñoz.

Con el lapso frenético de los Rayos, el ingresó de Osvaldo Martínez niveló el encuentro, dio libertad de William da Silva y fue el brasileño quien anotó el gol que le dio tranquilidad a América, cuando ingresó al área rival y, ante la salida de Marcelo Barovero, sacó un disparo que se metió lentamente a la portería rojiblanca. Necaxa no se pudo acercar más a la portería de Moisés, todo lo contrario, la zaga de los Rayos quedó a merced del instinto de Peralta, quien en aprovechó la confusión de sus rivales para marcar el segundo gol del partido y la sentencia definitiva para una final navideña.

América llegó a la final en el torneo en el cual cumple 100 años de vida. Lo hace después de cambiar de técnico a medio torneo y mantenerse sin perder durante 11 partidos.

El instinto práctico del equipo de La Volpe enfrentará al poderoso plantel de Tigres, aunque antes habrá una pausa de tres semanas, para que las Águilas enfrenten el compromiso del Mundial de Clubes, el cual era, hasta anoche, la gran celebración del equipo en el centenario.

eduardo.hernandez@eleconomista.mx

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