Lectura 5:00 min
Gobierno británico congela activos de Abramovich y Chelsea
Las autoridades del Reino Unido incluyeron al todavía propietario de los Blues en su lista negra de oligarcas rusos, imputándonle una serie de medidas para frentar su economía.
Apenas unos días después de que Roman Abramovich anunciara que ponía a la venta al Chelsea, el gobierno del Reino Unido ha frenado esa transacción y otras partes de los ingresos tanto del ruso como del conjunto londinense, que se encuentra en plena lucha por la Premier League y la Champions.
“La secretaria de Relaciones Exteriores, Liz Truss, anunció la congelación total de activos y la prohibición de viajar de siete de los oligarcas más ricos e influyentes de Rusia, cuyos imperios comerciales, riqueza y conexiones están estrechamente asociados con el Kremlin. Como parte de los principales esfuerzos del Reino Unido para aislar a Putin y a quienes lo rodean, a estos oligarcas, que tienen un patrimonio neto colectivo de alrededor de 15,000 millones de libras (19,600 millones de dólares, aproximadamente), se les congelarán sus activos en el Reino Unido, se les prohibirá viajar aquí y ningún ciudadano del Reino Unido o empresa puede hacer negocios con ellos. Los recientemente sancionados por el Reino Unido incluyen a Roman Abramovich, propietario del Chelsea Football Club”, dice el comunicado del gobierno británico.
Esto significa que Abramovich no podría recibir nada de dinero de concretarse la venta del club, ya sea directa o indirectamente. Además, mientras dure este proceso, el Chelsea tiene frenada la venta de merchandising (camisetas y productos oficiales del club) y de boletos de entrada a sus juegos de local, ya que solo serán respetados los abonos adquiridos desde el inicio de temporada. El equipo tampoco puede fichar nuevos jugadores o abrir nuevos contratos a los que ya están en su plantel.
Sin embargo, el gobierno también señaló en su comunicado que ha permitido una licencia al Chelsea para que continúe jugando partidos en las competencias en las que todavía se encuentra activo mientras se resuelve el conflicto, como son la Premier League y la Champions.
“Esta licencia solo permitirá ciertas acciones nombradas explícitamente para garantizar que la persona designada (Roman Abramovich) no pueda eludir las sanciones del Reino Unido. La licencia se mantendrá bajo revisión constante y trabajaremos de cerca con las autoridades del futbol”, recalca el comunicado.
De acuerdo con esto último, los aficionados tienen permitido comprar comida y bebidas durante los partidos en Stamford Bridge, la casa del Chelsea. Además, los minoristas externos que compraron o produjeron merchandising del club antes del jueves 10 de marzo podrán vender lo que aún tengan en existencia siempre y cuando el dinero no llegue a las arcas del equipo.
“Disputaremos los partidos de nuestro equipo masculino y femenino hoy contra Norwich y West Ham, respectivamente, y tenemos la intención de entablar conversaciones con el gobierno del Reino Unido sobre el alcance de estas medidas. Esto incluirá solicitar permiso para enmendar las medidas a fin de permitir que el club opere con la mayor normalidad posible. También buscaremos orientación del gobierno del Reino Unido sobre el impacto de todo esto en la Fundación Chelsea y su importante trabajo en nuestras comunidades”, respondió el Chelsea FC al comunicado del gobierno británico.
Cabe recalcar que durante el tiempo que dure la sanción a Abramovich, la licencia permite al equipo pagar remuneraciones, asignaciones y pensiones de todos los empleados, incluidos los salarios de los jugadores y su cuerpo técnico. También los costos de viaje hacia y desde los partidos, o con fines de entrenamiento, por parte de cualquiera de las categorías del equipo para jugadores y personal esencial.
Sobre la afectación directa a los vínculos con los jugadores, el club tiene prohibido hacer ofertas a elementos como Antonio Rüdiger y Andreas Christensen, quienes terminan contrato en junio. Así, ambos defensas podrán marcharse libres a cualquier club. Un caso que podría ser diferente es el del capitán César Azpilicueta, quien tiene una cláusula de renovación automática, aunque todavía no es seguro si puede o no ejecutarla.
“No puede haber refugios seguros para aquellos que han apoyado el brutal ataque de Putin contra Ucrania. Las sanciones de hoy son el último paso en el apoyo inquebrantable del Reino Unido al pueblo ucraniano. Seremos despiadados al perseguir a aquellos que permiten la matanza de civiles, la destrucción de hospitales y la ocupación ilegal de aliados soberanos”, enfatizó Boris Johnson, primer ministro británico, dentro del comunicado.
El Reino Unido ya ha sancionado a más de 200 de las personas, entidades y subsidiarias más importantes y valiosas de Rusia desde la invasión, y más de 500 de ellas ahora están incluidas en su lista de sanciones. La última actualización de la lista, en la que fue nombrado Abramovich, también incluye a Oleg Deripaska, con participaciones en el Grupo En+; Igor Sechin, director ejecutivo de Rosneft; Andrey Kostin; presidente del banco VTB; Alexei Miller; director general de la empresa de energía Gazprom; Nikolai Tokarev; presidente de la empresa estatal rusa de oleoductos Transneft; y Dmitri Lebedev, presidente de la junta directiva de Bank Rossiya.