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Economía

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“Se busca un esquema más justo para el reordenamiento de cuentas de la Tesorería”

La unidad  tiene un convenio con 24 bancos, los cuales, desde la perspectiva del gobierno federal, han sacado provecho de los recursos públicos y pagan intereses “pírricos” a la administración.

La Tesorería de la Federación se encuentra en un proceso del reordenamiento de sus cuentas bancarias, luego de haber detectado un esquema donde los bancos sacan ventaja de los recursos públicos y devuelven apenas “pírricos” intereses a la administración pública federal.

En el marco de su participación en el “Foro de Inclusión Financiera Digital”, María Elvira Concheiro Bórquez, Tesorera de la Federación, indicó que una de las alternativas (más no la única) que se explora es la conexión directa al Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) de Banco de México, para que así pueda haber un mayor control de los recursos públicos, sin necesidad de tener la intermediación de un banco.

“Hemos insistido con Banco de México en la posibilidad de tener SPEI directo, que permitiría una conjunción de alternativas, porque no pensamos que sea un esquema único, sino mixto, ya que el tema lo amerita, pues hay una cantidad de operaciones (relacionadas con la administración pública) que se hace por ventanilla, sobre todo para facilitarle la vida a la ciudadanía en el cumplimiento de sus obligaciones fiscales”, detalló en entrevista.

En tres bancos, el grueso de operaciones

Concheiro Bórquez apuntó que en el sistema actual, que se busca modificar,  se tiene un convenio con 24 bancos, por los cuales pasan cerca de 5 billones de pesos anuales correspondientes al erario y 75% de dichos recursos se intermedian principalmente a través de tres entidades bancarias.

En este contexto, la tesorera detalló que los recursos se quedan hasta por dos días en los bancos, periodo que aprovechan para poder obtener ganancias al invertirlos en otros esquemas, lo cual contraviene la lógica de este gobierno de que “nadie privado ganará con recursos públicos”.

“Nosotros pagamos a la banca privada por cada una de las operaciones que se hace, además de que en muchos casos le cobran a los contribuyentes, después de eso, esos recursos tienen dos días para estar en manos de los bancos…  Estamos hablando de un volumen de casi 5 billones de pesos que pasan por 24 bancos, este jugoso negocio nos da a la Tesorería unos pírricos recursos por intereses, calculados en promedio y con la tasa más baja del mercado”, detalló Concheiro Bórquez.

La funcionaria destacó que este esquema es parte de la herencia de gobiernos anteriores, donde se tenía la premisa de obtener ganancias a costa de la administración de recursos públicos, lo cual se busca eliminar en este gobierno.

“Hay un aspecto fundamental de la construcción de una soberanía que fue gravemente afectada por las políticas, por el modelo neoliberal, de décadas anteriores y que tenemos que ir desmontando”, añadió la tesorera de la federación

Cuestionada sobre la actitud de los bancos respecto a estos señalamientos, la funcionaria indicó que el sector ha tenido una buena respuesta en esta situación y se espera que pronto se concluya con un acuerdo que sea más justo, donde no se prevé la salida de la banca en este tipo de operaciones.

Condiciones reguladas

“Ese proceso va avanzando muy bien, creemos que será importante, no se sale del circuito de los bancos, pero lo que sí es que se hará sobre condiciones mucho más reguladas, justificadas, de una manera más transparente para la propia administración y esto será un gran avance administrativo”, destacó.

Asimismo, detalló que también las dependencias gubernamentales están en un proceso de reordenamiento de sus cuentas bancarias.

fernando.gutierrez@eleconomista.mx

Fernando Gutiérrez es editor de EconoHábitat

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