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Sube de tono el conflicto entre GMéxico y GAP

Ambos grupos han mantenido una complicada relación porque los estatus legales del administrador de aeropuertos refieren que ningún accionista podrá poseer más de 10% de las acciones de la firma y GMéxico tiene ya 29.58 por ciento.

Las diferencias entre Grupo Aeroportuario del Pacifico (GAP) y Grupo México (GMéxico) subieron de tono este miércoles, un día después de haber realizado su asamblea ordinaria de accionistas.

Mientras el primero acusó al abogado y representante de la firma minera, Luis Cervantes, de mostrar una actitud hostil en la reunión, éste manifestó que su derecho a aplazar la votación de algunas decisiones fue atropellado y que interpondrá los recursos legales correspondientes.

Es una realidad que intentarían demandarnos. No es la primera vez. Estamos inmersos en un pleito judicial que va avanzando y los jueces han dado la razón a GAP , refirió uno de sus abogados, Raúl Fernández.

Desde hace un par de años, ambos grupos han mantenido una complicada relación porque los estatus legales del administrador de aeropuertos refieren que ningún accionista podrá poseer más de 10% de las acciones de la firma y GMéxico tiene ya 29.58 por ciento.

Sin embargo, Cervantes manifestó en entrevista que si bien el límite accionario es preciso, desde el 2006, con la Ley del Mercado de Valores se eliminó la prohibición absoluta para que cualquier accionista pueda tomar control de una emisora, por lo cual actúan conforme a la ley.

Pese a los diversos procesos que están en marcha respecto de la validez o no de los estatutos de GAP, que han tenido resultados positivos para ambas partes, Cervantes comentó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya ha resuelto favorablemente para ellos y que en los próximos meses podrían tener el fallo final.

En la conversación, el abogado reiteró una frase: no me crean a mí, por lo cual su apuesta está en lo que marca la ley, en la que, dice, han argumentado su postura.

LA ASAMBLEA

En la asamblea del martes, se votó, entre otros puntos, la ratificación del Eduardo Sánchez Navarro, como Presidente de GAP, lo que no agradó al representante de GMéxico y peses a su voto en contra, con base en los estatus, la mayoría lo aceptó.

Desde el punto de vista de Raúl Fernández, Luis Cervantes tomó la palabra 70% del tiempo que duró la asamblea y escucharon y tomaron nota de sus palabras, aunque no pasó desapercibido que los representantes de GBM Casa de Bolsa hayan tenido una actitud de votación parecida a la de GMéxico, como si se estuviera prestando en su toma de control hostil de la sociedad .

Al respecto, el abogado del grupo minero dijo que a través de ese intermediario tienen, legalmente, 10 de 29.58% de las acciones. Así, el conflicto continuará.

alejandro.delarosa@eleconomista.mx

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