Cobre mantendrá avances en el 2011

En la jornada de ayer, el cobre regsitró pérdidas debido a que un aumento en los inventarios y ajustes de carteras presionaron al metal, aunque expectativas de déficit en el mercado para el 2011 mantenían el precio cerca de máximos históricos.

El cobre para entrega en tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME, por su sigla en inglé) cerró en 9,300 dólares la tonelada, desde 9,350 el miércoles y comparado con un mínimo de 9,205 dólares.

El metal rojo, usado en la energía y en la construcción, se mantuvo cerca de un máximo histórico de 9,392 dólares la tonelada, registrado el martes.

A veces hay que tomarse un respiro, incluso en este hiperventilado mercado, dijo Stephen Briggs de BNP Paribas.

Afectando el ánimo, los inventarios del cobre en la LME han visto más aumentos. En diciembre subieron por última vez en 3,775 toneladas a cerca de máximos de dos meses de 367,725 toneladas.

Aunque analistas destacaron que los temores de suministro se mantendrían en el mercado.

No creo que marque un cambio en la tendencia, afirmó Briggs del incremento en las existencias, aunque agregó que había afectado levemente el ánimo el jueves.

Todos creen que va a haber ungran déficit el próximo año, indicó.

El metal rojo recortó parte de las pérdidas, debido a que el dólar pasó a terreno negativo frente a una cesta de importantes monedas, haciendo que los metales sean más baratos para tenedores de otras divisas.

Una serie de datos en Estados Unidos reforzaron las visiones de sólido crecimiento económico.

Las ventas y los precios de casas nuevas subieron en noviembre, mientras que la confianza de los consumidores trepó en diciembre a su nivel más alto desde junio.

El gasto de los consumidores subió por quinto mes consecutivo, mientras que las órdenes de bienes durables anotaron su mayor incremento desde marzo.

La reducción de la calidad del mineral, además de las perturbaciones y demoras de proyectos, implica que el suministro del cobre, posiblemente a partir de este año, podría no alcanzar una demanda estimada en unas 19 millones de toneladas.

La mina de cobre chilena Collahuasi aún no encuentra un puerto alternativo para sus embarques, después de que un accidente portuario frenara sus exportaciones.