Buscar
Mercados

Lectura 3:00 min

La rebelión de las tasas

En las últimas cuatro jornadas, hemos observado un rebote general de las tasas de largo plazo en el mundo. Por supuesto que México no es la excepción; la parte larga de la curva de réditos ha registrado un movimiento de alza.

El fenómeno resulta interesante, ya que no hay una correspondencia en la parte de un mayor riesgo de inflación o de un crecimiento mayor; se trata al parecer de un tema de desconfianza.

No parece haber un rebote significativo de la inflación ni de las expectativas de mediano plazo. Tampoco han cambiado mucho las circunstancias de crecimiento en el mundo, ni las trayectorias específicas de algún país. Sin embargo, de repente las tasas correspondientes a plazos muy largos se movieron notoriamente al alza desde la semana pasada.

Parece ser que hay un brote de desconfianza. ¿Hacia qué? En primer lugar a la efectividad de las políticas monetarias que se aplican actualmente. Si bien no se espera un viraje de las políticas expansionistas, si hay el reconocimiento de que éstas han sido poco efectivas en detonar un mayor crecimiento acelerado, por lo tanto hay la sensación de que una permanencia de tasas bajas no es sostenible a la larga.

Esta percepción se ha alimentado, principalmente, de las declaraciones de las mismas autoridades al respecto. En especial, algunos gobernadores del Comité de Mercados Abiertos de la FED (FOMC, por sigla en inglés) que han insistido en que un aumento a las tasas de referencia puede ser justificable incluso a partir de este mes.

En segundo lugar hay cierta desconfianza por la evolución reciente de los réditos de largo plazo en Japón. Tan sólo en tres semanas el alza de las tasas de largo plazo en dicho país ha sido bastante violenta. La razón aparente de este movimiento de tasas tiene que ver con la posibilidad de la aplicación de un plan de estímulo fiscal hacia la economía. Esto significa un mayor endeudamiento por parte del gobierno y tasas mayores. Esta posibilidad también se discute en Norteamérica y otros países desarrollados de Occidente; si es así, es entendible que haya desconfianza también en los niveles de las tasas de largo plazo.

Habrá que estar atentos en las próximas semanas a ver si esta aparente rebelión en los mercados de dinero se confirma. La próxima semana se reúne el FOMC. No pensamos que suban las tasas en esta ocasión, ello podría reducir el peligro de un aumento de expectativas con relación a un aumento de las tasas de largo plazo.

Mientras tanto, la sensibilidad ha crecido entre los inversionistas producto de las elevadas valuaciones y los fuertes rendimientos que se generaron en las semanas anteriores. Simplemente desde sus niveles actuales, muchos precios de activos financieros lucen frágiles. La esperanza de que no se presente un ajuste mayor reside en la inacción de las autoridades con relación a las tasas. Punto.

Ya se descuenta la debilidad del crecimiento y por ese lado hay pocas expectativas de recuperación. Luego entonces, el cambio en la gran distorsión que sostienen los mercados provendrá de lo que decidan los banqueros centrales y, en segundo orden, los cambios que puedan suceder ante procesos electorales importantes; principalmente el de Estados Unidos.

El entorno no ha cambiado en cuanto a su esencia. Pero el aumento reciente de las tasas largas en el mundo describe un ambiente que seguirá generando mucha volatilidad de las cotizaciones y sacudidas, en momentos relevantes, en todos los mercados y tipos de activos financieros.

*Rodolfo Campuzano Meza es director de Estrategia y Gestión de Portafolios de Invex. Cualquier pregunta o comentario puede ser enviado al correo:

perspectivas@invex.com

Twitter: @invexbanco

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas