Ir más allá de la disculpa pública

La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador tiene el reto de restaurar la confianza de los ciudadanos a través de abatir la impunidad que permea en México, precisó un análisis generado por el sitio especializado en crimen organizado InSight Crime.

El artículo hace referencia a las recientes disculpas dadas por el gobierno mexicano a las familias de cinco jóvenes en Veracruz que fueron detenidos por parte de autoridades públicas para que luego éstas mismas, presumiblemente, les entregaran a los jóvenes a miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, actualmente una de las organizaciones criminales con mayor despliegue en el país.

Pese a estas disculpas —expone el artículo—, aún no hay indicios claros de que la impunidad sobre el caso se revierta, ya que desde hace tres años que ocurrió el incidente, en el transcurso de las investigaciones se han arrestado a 21 sospechosos, y ninguno de ellos ha alcanzado condena todavía.

Cuitláhuac García, el gobernador electo recientemente (de Veracruz), ha puesto en marcha un plan de emergencia para disminuir el número de desaparecidos y ha solicitado ayuda de organizaciones internacionales para encontrarlos; según varias ONG, más de 5,000 personas han desaparecido en Veracruz en la última década, se indica.

Las disculpas por parte del gobierno federal, se precisa, pueden ser una nueva manera de tratar las violaciones de derechos humanos o también se puede convertir en una expresión de “promesas falsas y disculpas vanas”.

Asimismo, se destaca que la lucha contra los cárteles en México ha dejado como consecuencia la desaparición de más 40,000 personas, unos 26,000 cadáveres que siguen sin ser identificados y unas 1,100 fosas comunes en el territorio nacional.

Ayotzinapa

El autor del artículo en Insight, Camilo Carranza, refiere el caso de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa y la recién creada comisión de la verdad sobre el caso, que busca develar qué fue lo que pasó con los jóvenes normalistas.

“Este caso, que se ha convertido en un símbolo de la corrupción y la impunidad en México, todavía no ha dado pie a ninguna condena”, señala.