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Mercado laboral mexicano, aún con desafíos
Más del 60% del empleo en el país es informal: OCDE
Más del 60% del empleo en el país es informal: OCDE
Uno de los principales desafíos que enfrenta la economía nacional, sin duda, consiste en detonar la apertura de más opciones laborales en el país. Y es que, a pesar de que el mercado laboral mexicano ha mostrado mejor comportamiento en comparación con los de otros estados -desde la recesión-, es una realidad que el diferencial en la tasa de desocupación registrada en abril de 2013 con relación a septiembre de 2009 -equivalente al 0.8%, al pasar de 6.0 a 5.2%-, podría persistir en lo que resta de 2013 y en 2014, tal como lo reveló el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Perspectiva anual del empleo 2013.
De acuerdo al documento, una de las principales causas radica en el débil crecimiento que los países afiliados al organismo han evidenciado en los últimos tiempos. A ello se suman otros factores, entre los cuales la informalidad reclama el sitio de honor.
En el caso de la República Mexicana, dice el reporte, más de 60% del empleo es informal, lo que implica que muchos trabajadores permanecen fuera del alcance de la regulación del mercado laboral y de la protección social.
Esta coyuntura, con capacidad para alentar tasas superiores de desocupación, se mantiene relativamente estable debido a la ausencia de un sistema público de prestaciones por desempleo, lo que significa que muchos trabajadores que pierden su puesto deben tomar la primera oportunidad que se les presente.
Así, continúa el estudio de la OCDE, aquella fuerza laboral que perdió su empleo en el sector formal después de la crisis financiera global, se volcó hacia la informalidad para compensar la pérdida de ingresos, lo que ha derivado en que gran parte del crecimiento económico tenga en el ámbito informal a su principal detonante, al tiempo que las oportunidades en el sector establecido permanecieron en alrededor de tres cuartos de punto porcentual por debajo del nivel previo a la recesión.
Perspectivas futuras para el empleo en México
El trabajo en México, además de la informalidad per se, tiene algunos pendientes que merecen atención.
En cuanto al futuro laboral de la población joven –entre 15 y 24- será esencial desplegar estrategias vigorosas, pues de acuerdo a la institución con alcances internacionales, este segmento –especialmente las mujeres- permanece fuera de los mercados profesional, educativo y formativo.
De hecho, México ocupa el segundo lugar con una mayor proporción de jóvenes mexicanos que ni estudian ni trabajan, denominados "ninis", el segundo más alto en la OCDE después de Turquía, y más de un tercio de las mujeres jóvenes están dentro de esta categoría en comparación con uno de cada 10 hombres.
El análisis manifiesta que aunque algunas mujeres no buscan empleo para encargarse de sus hijos, para otras esta situación refleja las dificultades que tienen los jóvenes para acceder y permanecer en el mercado laboral.
El informe señala que aunque en México el índice de empleo haya disminuido, las tasas de personas que ni estudian ni trabajan han permanecido estables desde la recesión.
Lo anterior, señala el organismo, se debe al incremento en la proporción de jóvenes que estudian o toman otra formación, tendencia que es prometedora, ya que un mayor acceso a la educación podría ayudar a acceder al sector de empleo formal.
En este sentido, resulta primordial fomentar una mayor inmersión en mercado laboral de las mujeres, pues en el país se refleja que este segmento de la población tiene baja participación en comparación con la media en la OCDE.
"Aumentar la tasa de participación de las mujeres mejorando sus oportunidades laborales debería promover el potencial económico de México y reducir el riesgo de pobreza", sentencia la organización, luego de señalar que al tercer trimestre de 2012, el acceso al trabajo para las mujeres en México fue de 47%, el nivel más bajo de los países que integran al organismo después de Turquía, la cual a su vez ha permanecido estable desde antes de la recesión.
Para finalizar, la entidad puntualizó que la reforma laboral no ha terminado por impulsar la apertura de vacantes para los mexicanos, en gran medida por su incapacidad para regular con pertinencia los contratos indefinidos (salvo por la extensión máxima del periodo) y el despido.
De acuerdo con la experiencia de los países de laOCDE en los años 90 del siglo pasado, en ausencia de más reformas que regulen el despido, el mercado laboral mexicano continuará segmentado con el empleo informal, el cual será sustituido por el también precario trabajo temporal.
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