Israel y Líbano elevan el tono mientras EU intenta evitar la guerra

El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Israel Katz, advirtió el martes de que pronto se tomaría una decisión sobre una guerra total contra Hezbolá, mientras Estados Unidos trata evitar un conflicto mayor entre Israel y el movimiento libanés Hezbolá.

El enviado estadounidense Amos Hochstein fue enviado al Líbano para intentar calmar la tensión tras un aumento de los disparos en la frontera sur del Líbano, que se han intensificado hasta el punto de que Hezbolá ha insinuado que podría atacar Haifa, la tercera ciudad más grande de Israel.

Hezbolá, respaldado por Irán, lleva ocho meses intercambiando disparos con Israel en paralelo a la guerra de Gaza. La semana pasada, el grupo disparó las mayores andanadas de cohetes y drones hasta la fecha contra instalaciones militares israelíes, después de que un ataque israelí mató al comandante de mayor rango hasta la fecha. Un portavoz israelí dijo que Israel había atacado el martes una unidad aérea de Hezbolá.

El grupo islamista afirma que no detendrá sus ataques a menos que haya un alto el fuego en la Franja de Gaza. Hochstein, representante especial del presidente estadounidense Joe Biden, dijo que había sido enviado al Líbano inmediatamente después de un breve viaje a Israel porque la situación era "grave".

Hemos asistido a una escalada en las últimas semanas. Y lo que el presidente Biden quiere es evitar una nueva escalada hacia una guerra mayor", dijo Hochstein el martes.

Hochstein se reunió con el jefe del ejército libanés el martes y habló con los periodistas tras una reunión con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, que dirige el movimiento armado Amal, aliado de Hezbolá y que también ha lanzado cohetes contra Israel. Estados Unidos y Francia están realizando esfuerzos diplomáticos para garantizar el fin negociado de las hostilidades en la frontera libanesa.

Hezbolá publicó un vídeo de nueve minutos y 31 segundos de duración de lo que dijo eran imágenes de sus aviones de vigilancia sobre Israel, incluidos los puertos marítimo y aéreo de la ciudad de Haifa. Haifa está a 27 kilómetros de la frontera libanesa.

Katz dijo en un post en X que tras las amenazas de Sayyed Hassan Nasrallah, jefe del grupo, de dañar los puertos de Haifa que son operados por empresas chinas e indias, "nos estamos acercando mucho al momento de decidir sobre el cambio de las reglas del juego contra Hezbolá y Líbano".

"En una guerra total, Hezbolá será destruida y Líbano será duramente golpeado", añadió. Israel, dijo Katz, también pagará un alto precio, pero que el país está unido y debe devolver la seguridad a los residentes del norte.

El jefe de derechos humanos de la ONU, Volker Turk, dijo el martes que también estaba preocupado por la escalada, y pidió "el cese de las hostilidades y que los actores con influencia tomen todas las medidas posibles para evitar una guerra a gran escala".