La crisis de Venezuela es humanitaria, no terrorista

Venezuela es un país en crisis. La economía está en ruinas. Para fines de este año, los expertos predicen que la inflación llegará a 1’000,0000% , una de las tasas más altas de la historia. Los servicios públicos y la atención médica son casi imposibles de conseguir. Los apagones son comunes, el agua escasea y el transporte público casi ha dejado de funcionar.

El crimen se ha vuelto rampante: cuatro de las 10 ciudades más peligrosas del mundo están en Venezuela. Hay tan poca comida que 60% de los venezolanos dice que ha perdido peso.

Las cosas están tan mal que los padres están dejando a sus hijos en orfanatos porque no pueden darse el lujo de alimentarlos.

Es obvio que Venezuela necesita ayuda. Sin embargo, la administración Trump está amenazando al gobierno de Maduro con agregarlo a la lista de patrocinadores del terrorismo. Sólo cuatro gobiernos se encuentran en la lista: Irán, Corea del Norte, Sudán y Siria.

Lista obsoleta

Fue en 1979 cuando Estados Unidos creó la lista de los países patrocinadores del terrorismo.

Joseph DeThomas, exfuncionario del Departamento de Estado y profesor de asuntos internacionales en la Universidad Estatal de Pennsylvania, califica a la integración de la lista como: “más un arte que una ciencia”, diciendo que “el contexto político y diplomático desempeña un papel considerable en tales designaciones”.

Los integrantes de la lista pueden enfrentar sanciones, prohibiciones de ventas relacionadas con armas y prohibiciones de ayuda económica entre otros castigos.

Un informe de la Brookings Institution del 2008 argumentó que la lista de patrocinadores del terrorismo es obsoleta y contraproducente.

Pakistán, que durante mucho tiempo ha ayudado a una serie de grupos terroristas, no está en la lista. De los 19 terroristas que llevaron a cabo los ataques del 11 de septiembre de 2001, 15 fueron de Arabia Saudita, pero ese país nunca ha sido incluido.

El senador Marco Rubio ha argumentado que el gobierno de Maduro tiene vínculos con Hezbolá y las FARC. Pero los expertos dicen que eso es en gran parte falso.

“Sospecho que esto se basará en rumores”, dijo David Smilde, un miembro en la Oficina de Washington en América Latina.

Es posible que agregar a Venezuela a la lista podría debilitar aún más al gobierno de Maduro al dificultar que las compañías petroleras estadounidenses sigan haciendo negocios con Venezuela. Pero eso es poco probable que realmente ayude a expulsar a Maduro del poder. De hecho, podría permitirle argumentar que la América imperialista es el verdadero enemigo.