Cuando la volatilidad política tiende a precio por pagar... literalmente

Buen día, mucho gusto en saludarte, recibiéndote con entusiasmo después de haberte dejado celebrar un aniversario más de la Revolución Mexicana, una revolución que nos hizo transitar de una dictadura personal a un estado de anarquía, para luego ser depositados en otra dictadura partidista, que finalmente se rompió para colocarnos en un estado colectivo de confusión

Mientras todo eso pasaba el mundo avanzaba, y hoy competir sin vanguardia es doble esfuerzo, y nos lo está haciendo ver penosamente el resultado de la reciente elección en Estados unidos.

No hay duda de que le han barajado los naipes a la sociedad mexicana de todas las formas que se pueda imaginar, sin que le hayamos entendido al truco... y seguimos cayendo en él, seguimos pagando por ver.

Digamos que este año las cosas cambian un poco, por decir lo menos, nuestro principal socio comercial cambia de administrador y el que llega viene con un plan que no se acopla a la modalidad que hemos tenido por años.

México resulta que tiene que encargarse de todos los mexicanos, y eso es algo que por mucho no ha sucedido en muchos sexenios. El migrante se va a Estados Unidos una vez que no encuentra oportunidades en México, cruza ilegalmente y encuentra sustento en otro país, la administración pública no sólo se deja de ocupar de quien se va; encima, ese que se va manda un caudal enorme de dinero de regreso a la economía y, contra toda razón, es lo mejor que puede sucederle a la administración pública.

Ese es otro tema, pero, ya que estamos celebrando la fiesta revolucionaria, abróchate el cinturón de seguridad porque lo que viene es de pronóstico reservado para México y no es culpa del nuevo mandamás en el país vecino, sino nuestra. ¿Y cuál es nuestra culpa?

No sabemos administrar a nuestros funcionarios públicos. Te suplico que antes de hacer memes sobre esta situación, hagas conciencia, las risas súbitas de los memes simpáticos no atenuarán las angustias venideras. No es culpa de quien llega altaneramente a moverte el tapete desde fuera, es culpa nuestra por no tener una respuesta categórica para quien nos viene a maltratar y no podamos hacer nada al respecto.

Pero esa también es otra historia, o una de muchas; la realidad es que la nueva administración de nuestros vecinos trae consigo temas similares en el mundo entero y de momento no sabemos qué elementos de comercio se aceleran o cuáles se detienen, los flujos de commodities agrícolas hacia México podrían terminar siendo apartados de secuestro si las negociaciones sobre el TLC se ponen astringentes.

México importa muchos granos y oleaginosas de EU, entre muchas otras, pero esta es una herramienta que puede ser usada como cuña.

Sea lo que sea para cuando todo este dicho y hecho entramos en un vacío de dirección impresionante, el dólar se pone increíblemente fuerte y firme mientras el yuan se devalúa, lo mismo que sucede en México con el peso pero con otro propósito. China no dejará de ser competitivo al mundo y buscará con la moneda ser capaz de impedir que la arrogancia del norte tenga capacidades más allá de las tolerables.

En el despliegue de fuerzas parece que el plan de desarrollo de la nueva administración intentará gastar fortunas en infraestructura y eso impulsará el precio de metales y bienes varios. Ese plan de infraestructura tendrá que ser financiado por alguien, y ese alguien parece que tendrá que ser el empresariado estadounidense que pasará a saludar a la nueva administración, uno a uno, de la nueva Casa Blanca.

El administrador recién estrenado ofrecerá un saludo con la mano diestra acompañado de un cúmulo grande de beneficios e incentivos para repatriar fortunas; en la mano izquierda seguramente tendrá un mazo que no será usado a menos de que el saludo con la mano derecha no sea suficiente seducción.

El tema es que para poder traer los dineros quienes los guardan fuera de EU, hay urgencia, es elemental para la nueva administración que se pongan miles de obras y proyectos de construcción a trabajar.

México tiene una construcción que hacer, según entendemos, lo enunciamos solamente por hacerlo, pero parece que no habrá más que patrocinar la barda antes de que le corten el flujo de remesas a la economía.

En los artes de nuestros mercados diremos para rematar que EU terminó de levantar una cosecha récord, impresionante cosecha se despacharon los agricultores. Y ahora están los sudamericanos sembrando su parte, y van bien las cosas, el avance al momento en Brasil y Argentina está en tiempo y forma, el mundo encuentra mucho sobreabasto, y si bien los precios aún no se colapsan, ya están en zonas de márgenes delgados, la red agrícola estadounidense está empezando a sufrir, los ingresos caen, las obligaciones de pasivos varios se agudizan y están esperando con mucha ansiedad que la nueva administración les haga un nuevo farm bill que les saque de este atolladero.

Dejemos esto en el remate de que los commodities agrícolas entran en el silencio de fin de año; en estas instancias el estacional nos muestra que la especulación gusta de comprar antes del Día de Acción de Gracias (Thanksgiving) y vender, pasando los tiempos festivos.

Estamos a nada de cerrar el 2016 y, si leíste con cuidado, el 2017 va a ser un año de alto impacto. Dicen que tener hambre no es sentir ganas de comer, el hambre es el sentimiento que emana de no saber si vas a volver a comer, ese es el mismo sentido de vacío que deja una administración postrada en quien aún se dice mexicano.

Ánimo.

aochoa@rjobrien.com