Buscar
Mercados

Lectura 4:00 min

¿Otro aumento de tasas?

Los participantes en el mercado muestran inquietud con relación a la evolución reciente de la inflación.

La Junta de Gobierno debe expresar lo mismo en su comunicado del jueves.

Sólo la intensidad del alza que aplicaron el 30 de junio pasado y la evolución reciente del tipo de cambio podrían reprimir a las autoridades de no aumentar la tasa de nuevo del día de hoy.

Pero parece muy probable que cerremos el año con una tasa de interés de referencia todavía mayor.

Ayer se publicó la inflación hasta el cierre de julio. El resultado anual de 2.65% (es decir, el aumento de precios de los últimos 12 meses) no es muy inquietante per se.

Pero la evolución en lo que va de este año, y en especial en los últimos dos meses, genera preocupaciones y afecta ya a las expectativas de inflación.

El dato todavía acarrea inflaciones mensuales del segundo semestre del año pasado, que fueron todavía muy bajas.

Pero los aumentos de este año muestran otra cosa. El Índice Nacional de Precios al Consumidor ha subido 0.58% entre enero y julio del 2016; es un dato bajo, pero el año pasado, en el mismo período, los precios en general sólo habían aumentado 0.06 por ciento. Distinto, ¿no?

¿De dónde provienen los aumentos? Cheque el subíndice de mercancías, la inflación de 12 meses que había hasta diciembre del 2015 fue de 2.81%; la inflación anual al cierre de julio es de 3.71%, casi un punto porcentual de aceleración con una tendencia claramente continua.

El aumento anual del Índice de Precios al Productor, que refleja la presión de precios de insumos para los fabricantes, ha brincado de 2.78% en diciembre del 2015 a 5.52% en julio.

Ahí no para la cosa, el gobierno incrementó los precios de la gasolina y tarifas eléctricas en julio y agosto; de este modo, el índice de precios administrados y concertados paso de 2.81% al cierre del año pasado a 3.20% en julio.

Quizás éste sea el factor de mayor preocupación de los participantes en el mercado ante el temor de que dichos aumentos, a la luz de la deficiencia de ingresos del gobierno, se vuelvan recurrentes.

Hoy, la Junta de Gobierno debe reconocer el efecto que ha tenido esta evolución sobre las expectativas.

Tanto en la encuesta que el mismo lleva a cabo como en la que efectúa Banamex entre los principales analistas privados, la inflación esperada para el 2017 ya es de 3.4%, cuando a principios del año se ubicaba alrededor de 3.2 por ciento.

En apego a su mandato suena lógico que haya una señal reflejada en un nuevo aumento de las tasas de referencia, aunque en los estimados de cierre de año siga habiendo los que apunten a una inflación ligeramente superior al objetivo.

Pienso que el aumento de medio punto que tuvo lugar el 30 de junio pasado pudo percibirse como excesivo, derivado de la fuerte volatilidad que había en ese momento por el Brexit.

Es posible que ello y la baja de presión sobre el tipo de cambio pudieran hacer al Banxico esperar.

Pero si en agosto y septiembre la inflación de servicios o de bienes agropecuarios sorprende al alza (cheque el estado de tiempo), posiblemente en septiembre tengamos una tasa mayor.

Y en diciembre, al parecer, la Reserva Federal en Estados Unidos podría aumentar sus tasas, ello genera otro incentivo para que la junta siga con una actitud de resguardo.

Ni hablar, parece que veremos tasas de referencia mayores; vamos a ver cómo reaccionan las demás variables ante ese contexto. De entrada, nuestra alusión a una velocidad lenta del crecimiento para el segundo semestre adquiera mayor validez.

*Rodolfo Campuzano Meza es director de Estrategia y Gestión de Portafolios de Invex. Cualquier pregunta o comentario puede ser enviado al correo:

perspectivas@invex.com.

Twitter: @invexbanco

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas

Suscríbete