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Las rutas Santa Lucía
La ejecución de las obras del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles quedó a cargo del agrupamiento de ingenieros militares. Aunque hace cinco semanas, la coordinación de los proyectos para acceder a la nueva terminal aérea por la vía terrestre quedó a cargo del nuevo subsecretario, Rogelio Jiménez Pons.
Y también, las negociaciones para llevar a las líneas aéreas al AIFA. Con un pequeño staff, el extitular de Fonatur ha tratado de cumplir con las instrucciones presidenciales en un tiempo récord. Sobre la marcha, empero, ha tenido que empaparse de asuntos ya discutidos además de romper con resistencias y desconfianzas de antaño entre las agencias gubernamentales.
Además de los enviados del AIFA, del Grupo Aeroportuario de la CDMX, Banobras y la Agencia Federal de Aviación Civil, a esas mesas de trabajo acuden representantes de las secretarías de Gobernación, Hacienda, Sedatu y el gobierno del Estado de México.
Las limitaciones presupuestarias son resueltas en esos ámbitos, pero también hay un cúmulo de conflictos sociales que obstaculizaban al programa de construcción. Tan sólo había 175 interferencias a la obra del ramal ferroviario al AIFA, diseñado e instrumentado por la subsecretaría de Infraestructura.
La extensión del Tren Suburbano deberá quedar lista en 18 meses. Para la inauguración del AIFA quedan 40 días. Y hay temas de coyuntura por resolver. En esas mesas de trabajo recientemente hubo un debate entre los funcionarios federales sobre la pertinencia de permitir el ingreso de los asociados a las aplicaciones tecnológicas —Uber, Didi, Beat y Cabify— al nuevo complejo.
La nueva terminal aérea está prácticamente concluida. Igual, la torre de control. Y los edificios para recibir a los autobuses que provisionalmente trasladarán a los pasajeros del AICM y del AIT a Santa Lucía. Los traslados en autos de alquiler no es un asunto menor, porque las autoridades mexiquenses deberán procesar las peticiones de distintos agrupamientos de taxistas, interesados en brindar el servicio a los usuarios y los empleados del AIFA.
El transporte masivo no será la solución para la conectividad a Santa Lucía, en la primera etapa. El corredor urbano cruza los municipios de Tecámac, Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan, donde actualmente sólo circulan camiones y microbuses, y la conectividad al AIFA ha implicado una veintena de proyectos, cuyos avances ha sido desiguales.
Y los deslindes, implacables. “Del edificio terminal a las principales vías de acceso, somos responsables. Después de la barda perimetral, no”, establecieron fuentes militares, cuestionados sobre los avances de las obras. Y en efecto, los ingenieros militares quedaron a cargo de la vialidad de acceso al AIFA y también, de ocho kilómetros de vías para el tren suburbano hasta el edificio terminal.
A cargo de la SICT están el llamado acceso San Jerónimo, la vía libre Tonanitla y la extensión del Suburbano. Con recursos del Fonadin avanza —a marchas forzadas— la modernización del tramo de la autopista México-Pachuca que entroncará con Santa Lucía. Por el Oriente, el acceso estará concluido en tiempo y forma.
El gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo, comprometió 15 obras, casi todas concesionadas a la iniciativa privada. El atorón presupuestal en el Congreso local, pero, sobre todo, la conflictiva social han ralentizado los avances de obra. Paradojas de las megaobras de la Cuarta Transformación: Aleática —la nueva razón social de OHL en México— obtuvo la ampliación del título de concesión del Circuito Exterior Mexiquense, a cambio de realizar la conexión entre el Viaducto Bicentenario (que también está en su cartera de proyectos) y el CEM... ¿y vender sus acciones en el aeropuerto internacional de Toluca?
Otros accesos viales al AIFA, también concesionados, son las ampliaciones de las autopistas urbanas Siervo de la Nación, Naucalpan-Ecatepec y Tultepec-Pirámides. Los concesionarios, contratados por el gobierno mexiquense, también trabajan 24/7.
En seis semanas, el AIFA abrirá sus puertas. La coordinación entre las autoridades civiles y militares permitirá que la primera megaobra de la Cuarta Transformación sea inaugurada dentro de los plazos estipulados.
Ese mismo equipo —donde el general Gustavo Ricardo Vallejo y el subsecretario Jorge Nuño Lara son piezas imprescindibles— ya apunta a Tulum, la Península de Baja California y la Riviera Nayarita, para seguir cumpliendo con las promesas presidenciales.
Efectos secundarios
DEDICADOS. La palabra presidencial está empeñada y ahora solo falta que la AFAC, la agencia encabezada por el general Carlos Antonio Rodríguez Munguía, y el subsecretario Rogelio Jiménez Pons, convenzan a Aeromexico para despegar desde Santa Lucía. Mientras, el titular de la AFAC se dio tiempo para entregar al presidente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, el plan de vuelo del jet Hawker 800 que —según versiones periodísticas— tuvo al dirigente partidista entre sus pasajeros, en marzo del 2019. Ojalá el solicitante de la información y el sujeto obligado hubieran recurrido a la Plataforma Nacional de Transparencia. En el afán de desmentir a Reforma, quedó exhibido su influyentismo.