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Opinión

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Ha muerto el IFT; viva la Agencia de Transformación Digital

Se consumó. El Senado de la República también aprobó la extinción del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), tras 11 años y dos meses de existencia. ¿Qué sigue?

La reforma será remitida a las legislaturas de los estados para su aprobación y, posteriormente, su publicación en el Diario Oficial de la Federación. La presidenta Claudia Sheinbaum deberá emitir los decretos de extinción.

Desde la primera ocasión que el ex presidente López Obrador mencionó la posibilidad de eliminar el IFT, en su conferencia de prensa del 7 de enero de 2021, argumentando que los organismos autónomos representaban una carga para el erario público, eran fruto del neoliberalismo y no habían cumplido con sus objetivos de acabar con los monopolios, en este mismo espacio y otros defendí la importancia de preservar el IFT.

Mi defensa convencida y la de otros columnistas y analistas contrasta con la tibia-casi-fría-o-nula defensa del IFT de sus propios intereses, por sus comisionados actuales, quienes estuvieron previamente en el cargo e incluso sus trabajadores, que a diferencia de los del Poder Judicial, nunca salieron a expresarse en contra del atropello al derecho de acceso a las TIC y el trabajo realizado por el IFT.

También llama la atención el silencio de académicos y especialistas quienes en 2013 apoyaron y aplaudieron la reforma constitucional en materia de telecomunicaciones y la creación un IFT autónomo, que ahora se metamorfosean con Morena y la 4T.

El Congreso tendrá un plazo de 90 días a partir de la entrada en vigor del decreto para realizar adecuaciones a las leyes secundarias, por lo que se abrirán nuevos frentes de batalla en el Poder Legislativo y modificaciones impredecibles en materia telecom, radiodifusión y competencia.

Los cambios legales incluirán adecuaciones administrativas para supuestamente evitar la duplicidad de funciones e incorporar las tareas del IFT a la dependencia encargada de elaborar y conducir las políticas de telecomunicaciones y radiodifusión y la nueva autoridad de competencia económica.

Los recursos humanos, materiales, registros, plataformas y sistemas electrónicos pasarán a formar parte de dicha dependencia del Ejecutivo Federal. Esto incluye el fideicomiso del IFT, cuyo saldo saldo al 30 de septiembre de 2024 fue de 1,500,759,435.5 pesos, disponibles la 4T haga con ellos lo que le plazca.

Es importante aclarar que sólo hasta que entre en vigor la legislación secundaria modificada estará extinto el IFT, por lo que todavía tiene varios últimos meses de estertores. Los actuales comisionados del IFT concluirán sus funciones cuando entre en vigor dicha legislación secundaria.

Para quien tenga duda sobre si algo cambia con la extinción del IFT, todos sus actos jurídicos siguen vigentes, incluidas las medidas regulatorias asimétricas, los títulos de concesión y sus obligaciones.

Las modificaciones al artículo 28 constitucional, las cuales tienen que ver con la nueva autoridad de competencia económica y la dependencia encargada de elaborar y conducir las políticas de telecomunicaciones y radiodifusión del Ejecutivo Federal, ambas entrarán en vigor 180 días (seis meses) después de la publicación de la legislación secundaria.

La nueva autoridad de competencia absorberá ejercerá en forma exclusiva (como actualmente lo hace el IFT) las facultades de competencia económica para regular de forma asimétrica los participantes en los mercados telecom y radiodifusión, para lo cual el Poder Legislativo expedirá leyes respectivas. Una vez más se abrirá un interesante debate legislativo y frente de batalla sobre la pertinencia o no de preservar la regulación asimétrica y la preponderancia telecom y de radiodifusión. Será una oportunidad de oro para que desaparezca de una vez por todas la preponderancia.

Dicha nueva autoridad de competencia tendrá entre sus funciones imponer límites a la concentración de frecuencias del espectro radioeléctrico, a la propiedad cruzada de medios y la desincorporación de activos. La reforma dice que tendrá independencia técnica y operativa en sus decisiones y que se garantizará la separación entre la autoridad que investiga y la que resuelve los procedimientos; pero al estar subordinada al Ejecutivo Federal, esa “independencia” es sólo nominativa, una quimera y una futura fuente de conflictos.

En tanto que la dependencia encargada de las políticas de telecomunicaciones y radiodifusión tendrá el otorgamiento y revocación de concesiones, así como fijar el monto de las contraprestaciones, politizando estas decisiones, el más grande retroceso de la reforma que extingue al IFT como institución autónoma.

La simple creación de la nueva autoridad de competencia económica destruye el objetivo y principio de simplificación administrativa que pretendía la reforma de extinción de los organismos constitucionales autónomos, porque abre las ventanillas de competencia económica, de regulación y de políticas de telecomunicaciones y radiodifusión.

Al mismo tiempo que queda extinto el IFT, se publicó en el DOF el decreto que crea la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT), como una secretaría de Estado, cuyas atribuciones ua son, precisamente, elaborar y conducir las políticas telecom y de radiodifusión, las de inclusión y gobierno digital y TIC. También será responsable del correo, la capacidad satelital, la soberanía tecnológica, los protocolos de ciberseguridad, la mejora regulatoria y decidir el nombramiento de los especialistas TIC del gobierno. Un mega poder pero sin el componente de la competencia económica.

Finalmente, el Organismo Promotor de Inversiones en Telecomunicaciones (Promtel) pasa de ser un organismo descentralizado del gobierno a quedar sectorizado a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes. El Promtel vigila el cumplimiento de la Red Compartida de Altán Redes. ¿No debería hacerlo la nueva ATDT? Este cable ha quedado suelto: cómo se amarrará.

Este es mi último artículo en defensa del IFT al pie de su lecho de muerte… mientras otros comienzan a repartirse sus bienes y legado como suele ocurrir. Gracias por haber existido. QEPD.

X: @beltmondi

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Presidente de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi). Analista de medios y telecomunicaciones y académico de la UNAM. Estudia los medios de comunicación, las nuevas tecnologías, las telecomunicaciones, la comunicación política y el periodismo. Es autor del libro El presidencialismo mediático. Medios y poder durante el gobierno de Vicente Fox.

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