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Alertan sobre los riesgos de alimentos light
40,000 millones de pesos aproximadamente es lo que deja el mercado de las cooperativas escolares a las empresas refresqueras, según informó el diputado federal Xiuh Tenorio.
Diputados y activistas de la sociedad civil criticaron fuertemente el anuncio del secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, sobre la apertura de productos light en primarias y secundarias, ya que numerosos estudios indican que son cancerígenos y no promueven el buen desarrollo del infante.
Xaviera Cabada, coordinadora del Área de Salud Alimentaria de la organización civil El Poder del Consumidor, explicó que las sustancias contenidas en este tipo de productos, como el aspartame y la sacarina, no permiten el pleno desarrollo del pequeño y promueve la aparición de células cancerígenas.
Citó el estudio Artificial Sweeteners and Cancer Risk in a Network of Case-Control Studies , de la revista científica Annals of Oncology de la Sociedad Europea de Médicos Oncólogos, el cual reporta que los edulcorantes, principalmente aspartame y sacarina, están altamente relacionados con el riesgo de presentar cáncer de mama, próstata, ovario y laringe. El estudio Lifespan Exposure to Low Dosis of Aspartame Beginning During Prenatal Life Increses Cancer Effects in Rats , de la misma publicación, confirma lo dicho.
En Environmental Health Perspectives, editada por los institutos nacionales de la salud de Estados Unidos, los autores de la Fundación Ramazzini de Oncología, con sede en Italia, afirman que los edulcorantes presentes en numerosos productos son agentes cancerígenos.
Favorecen a las refresqueras
Por su parte, el diputado federal Xiuh Tenorio consideró que la entrada del aspartame en las bebidas es una salida que le dio el gobierno a las refresqueras, las cuales quieren estar presente en las escuelas.
Hoy sabemos que el mercado de las cooperativas vale 40,000 millones de pesos y por supuesto que las empresas no lo quieren dejar. Ésta es una forma para que participen los refrescos, que es un producto que no aporta nada al niño .
Tenorio y Cabada coincidieron en que los mandatarios estatales y el Jefe de Gobierno capitalino deben ejercer presión sobre el gobierno federal para que resuelva el problema de la obesidad infantil, en lugar de proteger los intereses empresariales.
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