Sedena refuerza la seguridad en Culiacán tras la detención de Ovidio Guzmán

Tras la recaptura de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, fundador del Cártel de Sinaloa, el pasado 5 de enero en Culiacán, Sinaloa, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reforzó este fin de semana la seguridad en la localidad con la llegada de 1,500 militares.

Hasta el momento se contabiliza la presencia de más de 3,500 militares en la zona, según cifras de autoridades locales.   

Según lo expuesto por el Ejército, desde el 7 de enero arribaron estos elementos castrenses a Culiacán con el fin de mantener un operativo de vigilancia y evitar más jornadas violentas como la que se registró en aquella ocasión, la cual dejó 29 personas muertas, 10 de ellas militares.

Asimismo, buscarán colaborar con las autoridades en la detención de integrantes de la delincuencia organizada.

Se detalló que los 1,500 efectivos castrenses, llegaron el sábado pasado vía terrestre para reforzar los esfuerzos que ya realizan otros elementos del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional, en coordinación con las autoridades de los tres órdenes de gobierno.

Entre las características de las tropas que llegaron a Culiacán, se destaca su gran movilidad, flexibilidad y capacidad de despliegue, armamento, material, equipo y adiestramiento especializado con el que cuentan para diferentes tipos de actividades, lo cual refuerza las operaciones interinstitucionales que se llevan a cabo en coordinación con la Guardia Nacional, así como con autoridades estatales y municipales.

La Sedena también destacó que este personal coadyuvará con las autoridades locales en actividades de labor social en beneficio de las diferentes localidades de Sinaloa, realizando asistencia social, alimentaria y de salud, consistentes en proporcionar consultas médicas, odontológicas, establecimiento de comedores, trabajos de carpintería, herrería, albañilería, pintura, peluquería y reparación de aparatos electrodomésticos.

En este tenor, se dijo que el personal militar ha beneficiado a 850 personas, con diversos apoyos, como 100 consultas médicas; 500 m2 pintado de bardas perimetrales y limpieza de calles; 300 raciones de comida calientes.

Así como 60 cortes de cabello; repartición de 2,080 botellas de agua y 122 despensas con productos básicos.

El titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Sinaloa, Cristóbal Castañeda, indicó que estas acciones se realizaron en apoyo a la “Operación Culiacán” a través de la Novena Zona Militar. De esta manera, indicó, suman alrededor de 3,500 militares que realizan trabajos como parte del “Plan Nacional de Paz y Seguridad”.

Es preciso señalar que la llegada de los elementos militares es para reforzar la seguridad en la capital. No se han presentado nuevos incidentes en la ciudad”, aseguró Castañeda.

Mientras que se dio a conocer que la fuerza militar que arribó a la capital de Sinaloa llegó con unidades artilladas y todo tipo de implementos y equipos, desde las instalaciones de la Novena Zona Militar, y se desplazaron en caravana por las principales avenidas para que la ciudadanía se percate de su presencia.

En Jesús María exigen retiro de militares

Luego de que el pasado 5 de enero, Ovidio Guzmán “El Ratón” fue capturado en el poblado Jesús María por un operativo encabezado por la Guardia Nacional y el Ejército, habitantes de dicha localidad exigen el retiro de elementos militares ante las supuestas limitaciones que implementan los elementos castrenses a los pobladores.

Según medios locales, los pobladores salieron este lunes a las calles de Jesús María con pancartas y equipos de sonido, para exigir la salida del ejército y de las autoridades estatales de sus comunidades.

Los manifestantes que intentaron ingresar al área de oficinas de Palacio de Gobierno destruyeron los cristales de una de las puertas de acceso, sin embargo, fueron bloqueados por elementos de la Policía Estatal Preventiva, lo que causó momentos de forcejeos.

Y es que los pobladores denuncian que los militares han entrado a sus hogares, sembrando miedo y temor al grado que no han podido restablecer sus tareas cotidianas.

Además de reclamar que, por dos días, los mantuvieron aislados, sin poder salir de sus hogares, sin agua, luz eléctrica y en muchos casos sin alimentos, por lo que su demanda, es que el ejército e instituciones estatales salgan de la sindicatura.

Tras concretar una reunión con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, los manifestantes disolvieron la protesta ante la promesa del mandatario local de que hablaría con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, para cumplir la petición de los demandantes.

kg