Lectura 8:00 min
Si no tienes un plan para hacer crecer la economía al doble, no deberías aspirar a la presidencia: Marcelo Ebrard
México tiene dos grandes desafíos: economía y seguridad; “las capacidades del próximo presidente se pondrán a prueba en estos dos temas”, afirma el Canciller, que pide a la dirigencia de Morena fijar reglas claras para que la competencia sea pareja y se respeten las leyes electorales relacionadas con las precampañas.
Si un aspirante a presidente de la República no tiene claro cómo puede hacer crecer la economía del país al doble de lo que actualmente lo está haciendo y cómo resolver el problema de la inseguridad, no debería competir, afirma tajante Marcelo Ebrard Casaubon: “en crecimiento, muchas veces nos han vendido espejitos, ahora tenemos una oportunidad real”.
Ebrard estudió Relaciones Internacionales en el Colegio de México y una maestría en Administración Pública. Ha estado en la política desde 1985, primero como colaborador muy cercano de Manuel Camacho Solís y en los últimos 25 años con Andrés Manuel López Obrador. “Con casi 40 años de experiencia, puedo acreditar que estoy preparado. Los próximos años serán muy retadores, el contexto internacional ofrece grandes oportunidades para México, si las aprovechamos podemos lograr algo parecido a lo que hizo Corea del Sur… Si no haces las cosas correctas, en lugar de crecer al doble seguiremos creciendo al 2%, 2.2% y vamos a tener inversión, pero no los 50,000 millones al año que se requieren”.
Por ello, dice que lo que tiene que hacer la próxima administración es aterrizar, no solo el nearshoring, sino la seguridad de las cadenas de suministro de quienes quieren hacer negocios con Estados Unidos.
Durante una plática en las instalaciones de El Economista, expone que México tiene hoy una oportunidad estratégica de desarrollo, la cual no depende de un recurso natural, sino de una realidad geopolítica generada por el estrés que se vive en el escenario mundial y que durará unos 20 años. Advierte que la conducción del país durante el próximo sexenio será una empresa de alta dificultad, pero con condiciones “muy a favor”.
De acuerdo con su visión, a favor de México juega el hecho de que en el ámbito político los mexicanos decidieron hace cuatro años convertir en presidente a un outsider de la política, el presidente, Andrés Manuel López Obrador. “Eso ofrece la posibilidad de rehacer la relación del gobierno con la sociedad, lo cual le da solidez al sistema político. Esto ofrece gobernabilidad y eficacia, algo que está siendo muy complicado para otros gobiernos de la región”.
Considera que, para el próximo sexenio, lo estratégico va a ser el management, ese mecanismo que conduce los esfuerzos de los talentos de una organización y, en este caso, de toda esa oportunidad que al país se le presenta.
Y es que, desde su perspectiva, demandas como eliminar privilegios y el combate a la corrupción, así como la creación de un sistema nacional de salud, son procesos ya encaminados a lo largo de este sexenio, mientras que discusiones como la creación de la Guardia Nacional ya fueron superadas.
Para este aspirante, nacido en la capital del país en 1959, el objetivo final es reducir la pobreza extrema, cosa que no se ha podido en todo lo que va del siglo o, por lo menos, en la proporción que quisiéramos y, consecuentemente, aumentar la clase media.
Ventajas demográficas
Más allá del nearshoring, el aspirante a candidato presidencial valora las ventajas de la situación demográfica que tiene México. “Estamos en una situación casi ideal, si nos comparamos con países que tienen un problema severo de envejecimiento de la población. Estamos en una buena posición, respecto de nosotros mismos en otros momentos, porque no hay mucha presión de servicios, como hace unas décadas, cuando la tasa de natalidad era mucho más alta y representaba retos importantes en la planificación de políticas públicas, pues la población crecía a un ritmo tal que la planeación y la ejecución de las obras no podía seguir el ritmo”.
Dedica unas palabras a la cuestión de los recursos humanos y cuenta una experiencia que ha vivido India con Narendra Modi. “El primer ministro creó un espacio para conversar con todos los CEO de grandes empresas mundiales que son de India. Ese espacio le permite aprovechar la experiencia y las ideas de algunos de los empresarios y ejecutivos más brillantes del mundo. He empezado a organizar reuniones de este tipo con directivos mexicanos destacados, podrían ser detonadores de grandes cosas para México”.
En el caso de la atención al problema de la inseguridad, el todavía secretario de Relaciones Exteriores expone que se debe tener claro que hay condiciones exógenas y endógenas.
Algo que no depende directamente de México es la condición ambigua y contradictoria que hay respecto de diferentes estupefacientes, lo que ha propiciado que se les ha conferido un precio muy alto y, por lo tanto, utilidades impresionantes a quienes se dedican a eso. Ambigua porque mientras está prohibidísima la cocaína, el flujo va aumentando de manera importante cada año. “Lo ambiguo es porque los electores en Estados Unidos deciden que no es ilegal tener cocaína para su consumo. Eso lleva a un desmantelamiento importantísimo del prohibicionismo que por años ha promovido el gobierno estadounidense en todo el mundo. Hay una contradicción tremenda”.
Otro factor exógeno que apunta es la enorme disponibilidad de armas que tienen las organizaciones delictivas mexicanas, principalmente provenientes de Estados Unidos. Refiere que México presentó un mapa sobre el aseguramiento de alrededor de 55,000 armas, entre 2020 y 2022, de las cuales 45,000 fueron fabricadas y vendidas en el sur de Estados Unidos, particularmente en 10 condados. Incluso una armería vendió casi 2,000.
En cuanto a las causas endógenas, Ebrard plantea el alto poder de fuego de las organizaciones criminales. Asegura que ahora la Guardia Nacional representa una ventaja estratégica que ya está operando en campo, la cual sí está en condiciones de hacer frente a las organizaciones criminales, cosa que no podían hacer las policías locales.
Lo que falta, agrega, es dotar a ese cuerpo de tecnología y aumentar el número de casos de homicidios resueltos, respecto de los que se cometen. Eso implica armar una red nacional de fiscalías autónomas que permita incrementar, para las organizaciones criminales, el costo que tiene atentar contra la vida de las personas.
Entorno internacional muy complejo
“Van a ser aguas complejas en el ámbito internacional”, advierte. Si en Estados Unidos gana el Partido Republicano y llega un presidente con inclinación antimexicana, el grado de complejidad de la relación va a crecer. Pero no solo eso, alerta, va a haber tendencias proteccionistas fuertes. Por otra parte, el aún Canciller llama la atención sobre la incertidumbre en el desenlace de la tensión entre Estados Unidos y China, lo cual configura algo parecido a la trampa de Tucídides (aquella teoría que explica la relación entre una potencia hegemónica en declive y otra en ascenso, que puede conducir a una guerra hegemónica) y entonces México tendrá que ser muy hábil en eso, porque finalmente de China se importan 80,000 millones de dólares.
En Morena, necesario definir las reglas
Por otra parte, asegura tajante que es un mito que al interior de Morena no lo apoyan, porque cuando sale a la calle y se encuentra con las bases el trato de la gente le demuestra lo contrario. Sin embargo, hace una diferenciación: Los morenistas que tienen una relación de trabajo en el gobierno no acuden a su encuentro, pero los que no tienen sí lo apoyan.
Asimismo, se dice preocupado por la indefinición de Morena sobre las reglas para la elección de su candidato presidencial. Sobre todo, pide que definan cuáles son los límites y los tiempos. Le preocupa que, por una indefinición del partido, la autoridad electoral acuse a los aspirantes de actos anticipados de campaña.
Para el aspirante lo que hay que definir es cuándo se tienen que apartar de sus cargos quienes aspiran a ser el candidato, porque no va a ser compatible el trabajo en el Gobierno con las tareas de una candidatura.
Ebrard considera que cuando menos seis meses antes de realizarse la encuesta los funcionarios que aspiren a la nominación deben separarse de sus cargos. Además, eso equilibraría la competencia.
Por otra parte, se debe determinar cuál va a ser el procedimiento para hacer la encuesta, y si va a haber debates, cuántos serían. En ese sentido, advierte que la soberbia siempre es mala consejera. “Una cosa es que en estos momentos tengamos posiciones de poder y se avizore que podamos ganar la elección de 2024 y otra es que no tengamos cuidado de los tiempos y las formas”.
foto ee: fernando villa del ángel
”Para el próximo sexenio, lo estratégico va a ser el management, ese mecanismo que conduce los esfuerzos de los talentos de una organización”.