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Tecnología

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Ericsson quiere habilitar telcos digitales y apps

Ericsson anunció el lanzamiento de su sistema de cómputo en la nube (integrado por soluciones de software, hardware y servicios), en alianza con Intel.

Barcelona.- En el camino hacia el desarrollo de sociedades conectadas, Ericsson ha puesto la mirada en distintos ángulos para el cómputo en la nube. La firma de redes quiere ser aliada de las compañías de telecomunicaciones en el desarrollo de sus servicios digitales en cloud, hasta la implementación de esta tecnología en las ciudades también para la gestión y desarrollo de servicios públicos.

Esta apuesta se hizo patente durante el Congreso Mundial Móvil (MWC). Durante una reunión con medios, la compañía anunció el lanzamiento de su sistema de cómputo en la nube (integrado por soluciones de software, hardware y servicios), en alianza con Intel, que Ericsson buscará ofrecer a los operadores de telecomunicaciones para que puedan desplegar servicios digitales de almacenamiento en la nube y que puedan competir con firmas como Amazon, Microsoft o Google.

"Buscamos ayudar a los operadores a ver que los mejores van a convertirse en telcos digitales y desarrollar centros de datos. Lo que estamos haciendo es llevarles hardware para los centros de datos y software para administrar todas las nubes y seguridad en el almacenamiento y esto permitirá a nuestros consumidores construir sus centros de datos" dijo el presidente y director general de Ericsson, Hans Vestberg, en una reunión con medios y analistas.

Pero con el crecimiento del internet de las cosas y los vehículos conectados, Ericsson quiere sacar las nubes a la calle. La firma presentó una plataforma de cómputo en la nube pensada para la gestión y análisis de información de los vehículos conectados a la red.

Esto, dijo Vestberg, permitirá manejar la movilidad y los servicios de emergencia dentro de las ciudades. Pero esto sólo es el principio del potencial de la conectividad de los objetos.

"Los servicios públicos y la industria automotriz tienen un mayor potencial de beneficio con el Internet de las cosas y se puede ahorrar mucho dinero con la automatización de las industrias pero ahora el enfoque principal está en servicios públicos y automotriz", aseguró en una entrevista al finalizar su presentación.

De acuerdo con Ericsson, en el 2020 habrá 50,000 millones de objetos conectados. La empresa proyecta además que en el 2015, las redes de banda ancha móvil darán cobertura al 70% de la población mundial y la mitad del tráfico será generado por el video.

Con el crecimiento de esta conectividad y consumo de datos, existen retos para operadores y desarrolladores de servicios digitales "over the top" para mantener un funcionamiento óptimo.

Más allá de sumergirse en debates sobre la neutralidad de la red y si los operadores deben cobrar por dar preferencia de tráfico a los servicios que paguen más, Ericsson ha apostado por aliarse con desarrolladores como Facebook para mejorar el desempeño de las aplicaciones y servicios con un consumo más eficiente de la banda ancha móvil.

"Trabajamos con todos los desarrolladores de aplicaciones más importantes, los ayudamos a entender cómo deben diseñar los productos, cómo optimizarlos y finalmente no les gusta cuando su aplicación no funciona y la realidad es que los usuarios utilizan cada vez más las redes sociales y algún tipo de transmisión de video. Si podemos optimizarlas, la experiencia del consumidor mejora, utilizan menos ancho de banda de las redes", explicó en entrevista.

Incluso el directivo no descartó trabajar conjuntamente con Netflix, uno de los principales proveedores de video bajo demanda mediante suscripción.

México, mercado estratégico

Al término de su presentación en Barcelona, Hans Vestberg dijo a El Economista que México es uno de los mercados de mayor relevancia para la compañía.

"Hemos estado en México por más de 100 años y tenemos grandes operaciones que dan servicio al resto del mundo", dijo.

El directivo reconoció que, tras la reforma al sector de telecomunicaciones, la entrada de nuevos jugadores al sector abre un panorama de mayor competencia pare los desarrolladores de infraestructura, aunque dijo que continúan trabajando con los operadores más importantes.

Y si bien el país atraviesa por un momento de recorte presupuestario que podría poner en riesgo proyectos de conectividad, Vestberg consideró que habrá que esperar para ver el resultado de la reforma.

"La nueva regulación se está ejecutando y habrá que esperar a ver cómo dará frutos", agregó.

julio.sanchez@eleconomista.mx

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