7 factores sistémicos que contribuyen al desarrollo de obesidad en México y AL, según estudio

Un estudio publicado en la revista Nature Metabolism revela que los principales determinantes del sobrepeso en México y América Latina (AL) son sistémicos, es decir, dependen del entorno social y económico, mientras que una proporción menor son individuales -entre ellos la genética- y otra forma parte del comportamiento contextual.

Yazmín Macotela Guzmán, investigadora del Instituto de Neurobiología de la UNAM y coautora del estudio, enfatiza que la obesidad no es solo un problema de falta de voluntad, sino que está profundamente arraigada en las condiciones socioeconómicas y ambientales de la región.

Los siete determinantes sistémicos identificados por los investigadores son:

1. Ambiente alimentario: Publicidad agresiva de alimentos ultraprocesados, hipercalóricos y de bajo valor nutricional.
2. Ambiente físico: Cambio climático, deforestación y contaminantes ambientales que limitan la actividad física al aire libre.
3. Intereses económicos y políticos: Favorecen a las grandes empresas de comida chatarra por encima de la salud pública.
4. Inequidad social: Dificulta el acceso a alimentos nutritivos, actividades al aire libre y educación sobre salud.
5. Conocimiento científico limitado: Falta de inversión en investigación sobre la obesidad y sus determinantes.
6. Hábitos y costumbres: Pérdida de la cultura culinaria ancestral y adopción de prácticas poco saludables como el consumo excesivo de refrescos.
7. Genética: Si bien predispone a la obesidad, su efecto es menor que el de los demás factores.

México, Chile y Argentina tienen las mayores prevalencias de sobrepeso y obesidad en la región, mientras que Brasil y Colombia presentan las cifras más bajas.

Soluciones colectivas VS la obesidad

Macotela Guzmán propone soluciones colectivas basadas en las recomendaciones de la OMS y la OPS, como:

• Cambios en el estilo de vida: Promover la alimentación saludable y la actividad física en la comunidad.
• Políticas públicas: Hacer asequible la alimentación saludable, regular la publicidad de alimentos ultraprocesados y proteger a las poblaciones vulnerables.
• Investigación científica: Aumentar el número de estudios sobre la obesidad y sus determinantes en Latinoamérica.
• Educación científica: Divulgar el conocimiento sobre la obesidad y promover hábitos saludables en la población.
• Enfocarse en mujeres en edad reproductiva y en infantes es crucial para prevenir el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes en el futuro.

El estudio resalta el liderazgo de México en la implementación de políticas públicas para combatir la obesidad, como el etiquetado de advertencia de alimentos y bebidas, la prohibición de la venta y publicidad de productos ultraprocesados en las escuelas, las nuevas guías alimentarias y la ley de alimentación adecuada y sostenible.

Para Macotela Guzmán, es necesario unir esfuerzos para enfrentar este problema sistémico que afecta a millones de personas en México y América Latina.

Para 2035 más de la mitad de los adultos en el mundo tendrán obesidad o sobrepeso.