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Discriminación y Covid-19: cómo interactuar con personas diagnosticadas o con síntomas

La “sana distancia” ha permanecido como una de las medidas irremplazables determinadas por las autoridades sanitarias para la contención del virus; en este contexto es importante seguir las indicaciones bajo protocolos que no atenten contra la integridad y los derechos de las personas y que no promuevan la discriminación.

Es importante que las personas diagnosticadas con Covid-19 conserven sus derechos humanos, laborales, sociales y civiles. Así como que se les ofrezcan alternativas de comunicación e interacción educativa y con sus familiares, además de que al momento de recuperarse puedan reintegrarse a sus actividades sin ser sujetos de prejuicios o actitudes de rechazo sin fundamentos científicos. Foto EE: Archivo

Ante la emergencia sanitaria generada por la pandemia del Covid-19 se presentan nuevas reglas de convivencia e interacción social como método principal de prevención de contagio.

La “sana distancia” ha permanecido como una de las medidas irreemplazables determinadas por las autoridades sanitarias para la contención del virus; en este contexto es importante seguir las indicaciones bajo protocolos que no atenten contra la integridad y los derechos de las personas y que no promuevan la discriminación.

El Conapred (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación) elaboró una guía para mejorar las relaciones interpersonales en un contexto de alta propagación del virus evitando comportamientos discriminatorios, en general, y especialmente con las personas diagnosticadas con Covid-19 o que presentan síntomas de la enfermedad.

No es discriminatorio tomar sana distancia de estas personas, de hecho, que existan espacios especiales y aislados para ellos es también una forma de protección individual y colectiva. Sin embargo, la negación de derechos o exclusión de las personas portadoras del virus por su condición de salud sí es una manera de discriminación.

Es importante que las personas diagnosticadas con Covid-19 conserven sus derechos humanos, laborales, sociales y civiles. Así como que se les ofrezcan alternativas de comunicación e interacción educativa y con sus familiares, además de que al momento de recuperarse puedan reintegrarse a sus actividades sin ser sujetos de prejuicios o actitudes de rechazo sin fundamentos científicos.

Otro de los puntos importantes para evitar la discriminación en este contexto es la erradicación de ideas prejuiciosas o estereotipos no fundamentados. Aunque el origen del virus SARS-CoV-2 se sitúa en la ciudad de Wuhan, China, esto no responsabiliza a sus habitantes de la pandemia. Rechazar o culpabilizar a la población asiática de la emergencia sanitaria sí es una forma de discriminación.

Del mismo modo apartarse injustificadamente o rechazar a las personas de origen oriental o que tengan rasgos asiáticos por miedo a que sean portadoras no está justificado y también forma parte de las acciones que promueven la discriminación. Ni el aspecto físico ni racial son motivos para inferir de manera deliberada su condición de salud.

Infectados, familiares y personal médico

El documento elaborado por el Conapred destaca la importancia de tratar con absoluto respeto en todo momento a las personas diagnosticadas con el virus así como a todos quienes están en contacto con ellos. Especialmente al personal médico y a los familiares de los enfermos.

Actuar de manera discriminatoria con los enfermos, sus personas cercanas o el personal que labora en hospitales, ambulancias o servicios paramédicos, tiene consecuencias legales. En México no está permitido insultar, agredir o intentar suprimir los derechos de alguna persona por su condición de salud.

Otra actitud que debemos evitar y denunciar es la difusión de rumores o prejuicios que fomentan la discriminación hacia los pacientes diagnosticados con Covid-19, sus familiares y el personal médico.

Sana distancia no es polarización

Es importante distinguir el significado de la “sana distancia” del de polarización. Las indicaciones sanitarias buscan generar espacios seguros y una menor y más lenta propagación del virus. En este contexto se entiende que no todas las personas enfrentan la emergencia de la misma manera y no todas podrán acatar las normas de la misma forma.

Algunas personas no tienen las posibilidades económicas, sociales, laborales o sanitarias para ejercer de manera impecable el confinamiento voluntario. Es importante tener en cuenta estas diferencias y desigualdades para analizar las necesidades particulares de los distintos grupos poblacionales y no caer en acciones discriminatorias.

El distanciamiento social debe siempre fungir como una medida de protección individual y colectiva y nunca como un catalizador del miedo o rechazo a otras personas.

¿Qué debo hacer si identifico que alguien es discriminado por su condición de salud?

No sólo en el contexto del Covid-19 las actitudes de discriminación hacia alguna persona por su condición de salud son ilegales y son sujeto de intervención del Conapred.

Si alguna persona es despedida injustamente por haber sido diagnosticada con el virus o por ser cercana a algún diagnosticado, si a alguien se le negaron la entrada a supermercados o comercios por su condición de salud o si se le agredió verbal o físicamente es importante denunciar ante el Conapred. La negación de cualquier tipo de derecho humano, social, laboral o civil por situaciones relacionadas con su aspecto físico, su condición de salud o por prejuicios y estereotipos también puede reportarse ante el Conapred.

El contacto telefónico: 55 52 62 14 90 / 800 543 0033

El contacto electrónico: quejas@conapred.org.mx

ana.garcia@eleconomista.mx

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Economista por la Universidad Nacional Autónoma de México. Periodista especializada en género, derechos humanos, justicia social y desarrollo económico.

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