Embajador de la música mexicana en Estados Unidos

La captura de El Chapo Guzmán trascendió en la prensa estadounidense como pocas noticias sobre México lo hacen. La cobertura fue abrumadora. Reafirmó en el imaginario colectivo del vecino país la percepción de la mexicanidad como inherente al fenómeno del narcotráfico. Detener esa inercia parece imposible.

Pero hay quien lo está intentando, como un reconocido director coral y de orquesta estadounidense, quien decidió hace tiempo que México debía ser reconocido en su país por su cultura, más que por el narcotráfico.

Philip Brunelle creó ¡Cantaré!, un programa que desde el 2008 lleva cada año a Minnesota a dos jóvenes compositores mexicanos, quienes escriben música nueva para coros estudiantiles y comunitarios y, a final de su año de residencia, presentan ante la comunidad de Minneapolis-St. Paul el estreno mundial de su obra, cantada completamente en español.

En entrevista, Brunelle habló acerca de ¡Cantaré!, su experiencia con los compositores, sus expectativas para el futuro y su deseo de que México y su nueva música coral sean reconocidos en Estados Unidos y en el mundo.

¿Cómo surge ¡Cantaré!?

Soy uno de esos músicos extremadamente curiosos acerca de todo tipo de música, es por eso que hace unos seis años pensé: Bien, ¿qué es lo que sabemos en EU acerca de la música coral de nuestro vecino, México? No demasiado me respondí. Tal vez debería hacer algo al respecto , concluí.

Mi idea fue venir a México, entrevistar a cada compositor y llevarlos a Minnesota, para que compusieran la música para los niños. Una vez con las canciones listas, haríamos un gran concierto.

A cada compositor que entrevisto, le digo esto: Tú vienes por dos razones, una es para componer y, número dos, para ser un embajador de México, porque lo que la mayoría de las personas sabe de México son cosas negativas .

Quiero hacer cosas positivas. Les quiero hablar de lo que se siente vivir en el país, cuántas lenguas se hablan, qué come la gente, simplemente todo.

¿En qué consiste el programa?

Cada compositor viaja Minnesota tres veces al año. La primera, una semana en otoño para conocer las escuelas y para que pueda tener una idea del nivel de los coros. Luego regresan a México para componer las canciones. Cerca de Navidad, envían la música y las escuelas comienzan a trabajar con ésta en enero.

Luego, en marzo, regresan dos semanas para escuchar cómo va su música.

Y, finalmente en mayo, regresan cuando presentamos un gran concierto; una presentación con cerca de 700 niños cantando y un público cercano a 2,000 personas.

Pero éste no es un concierto sólo para público latino, éste es un concierto para toda la gente. Toda la música está en español y a los niños les encanta cantarla.

¿Cómo ha sido trabajar con ?compositores mexicanos?

Ha sido genial trabajar con ellos. Cada uno de ellos ha sido un éxito. Para ellos es una gran experiencia el venir; sin embargo, también ha sido genial para la comunidad. Este programa definitivamente le ha dado a la gente de Minnesota una idea positiva sobre México. Quería que la gente no sólo escuchara la música. Quería que lograran arraigar un sentimiento en México.

Éste es un gran programa en diferentes niveles. Lamentablemente, los mexicanos no saben nada al respecto.

¿A cuántos compositores entrevistas cada año?

Normalmente, entrevisto a entre seis y 10. La mayoría de las veces pienso: Tal vez este año que podría llevarme a cuatro . Sin embargo, no tengo los fondos ni el hospedaje, así que decido que tal vez pueda llevarme a uno u otro, el año que entra.

¿De dónde proviene el financiamiento de ¡Cantaré!?

Por lo regular, me acerco a algunas de las fundaciones en Minnesota. Por ejemplo, me ayuda General Mills (la compañía que hace cereales para el desayuno). Otra empresa que nos ayuda es 3M.

¿Has recibido algún tipo de ?ayuda del gobierno mexicano?

Recibimos un poco de ayuda por parte de la cancillería; ellos nos consiguen los boletos de avión. Y, siempre que vengo a la embajada estadounidense aquí, nos ayudan con las visas. Mi esperanza es expandir el programa, para traer más compositores.

Aunque mi objetivo real es que podamos llevar ¡Cantaré! a diferentes estados dentro de EU, pero antes quisiera conseguir más apoyo en México

¿Qué tipo de apoyo te gustaría ?recibir de México?

Primero, me gustaría encontrar la forma en la que las escuelas de México tengan acceso a la música que componen los chicos que llevo a Minnesota.

La otra cosa es que me gustaría encontrar una manera de incorporar a más compositores mexicanos en el programa; llevarlos a las escuelas de EU, para que transmitan la cultura de México.

Philip Brunelle cierra la entrevista con una sonrisa y la humildad de asegurar que la reacción del gobierno mexicano a su proyecto ha sido fantástica.

En el 2011 el gobierno federal, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, le entregó el Premio Ohtli, un reconocimiento creado para otorgarse únicamente a mexicanos o descendientes de mexicanos en otros países, que se han distinguido por su trabajo en beneficio de la comunidad mexicana en el extranjero.

jorge.camarena@eleconomista.mx