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Berlín recuerda su historia con el maratón
Un viaje por la historia de una de las justas deportivas más importantes de atletismo.
La historia del maratón de Berlín inició en 1974. Eran los años en que Alemania se encontraba dividida y gran parte del mundo, inmerso en la Guerra Fría. En esa primera edición contó con 286 corredores, quienes se olvidaron de los problemas políticos y sociales en los que se encontraba el país.
Pronto se fue haciendo famosa la carrera y en 1981, por primera vez, se corrió en parte de Berlín oriental gracias al apoyo de los ejércitos francés y estadounidense. Solamente unos pocos y vigilados corredores del este podían correrla, siempre y cuando consiguieran los permisos y la organización mantuviera en secreto sus nombres hasta el último momento, para evitar interferencias de la policía secreta.
No fue sino hasta 1990, apenas tres días antes de la caída del muro que dividía a Alemania, cuando se corrió el maratón en un país a punto de la unificación. Algunas crónicas de aquel año dicen que algunos alemanes rompieron en llanto con sólo cruzar la Puerta de Brandenburgo.
Hoy, el maratón de la capital alemana es uno de los más concurridos del mundo, con poco más de 40,000 participantes inscritos de casi todas las nacionalidades del planeta, convirtiéndose así en una de las carreras en las que todo corredor quiere participar.
Su emblemática historia ha llevado incluso a crear un museo en el que se expone el kit de ejecución usado por Haile Gebrselassie cuando estableció el récord del mundo en Berlín el 30 de septiembre del 2007 (2:04.26).
También se exhiben los zapatos usados por la corredora keniana Tegla Lorupe, además del número de la carrera, los zapatos y la botella de agua utilizada por Naoko Takahashi cuando rompió la barrera del 2:20, el 30 de septiembre del 2001 (02:19.47).
Pero no es sólo la historia de este maratón la que atrae a muchos de los atletas. Es también lo plano y sencillo del recorrido, lo cual es un plus para poder romper el récord del orbe, pues, de acuerdo con datos de la Federación Internacional de Asociaciones Atléticas, en Berlín, la marca mundial se ha roto en cinco diferentes ocasiones en la rama varonil, aunque las mujeres no han logrado imponer ninguna marca en la capital alemana.
El récord más reciente fue impuesto el año pasado por el keniata Patrick Makau, quien recorrió la distancia en 2:03.38 horas; tres años atrás, el etíope Haile Gebrselassie rompió su propia marca que había hecho en el 2007, con 2:04.26 horas, para dejarla en 2:03.59.
En el 2003, el también keniata Paul Tergat había sido el más rápido del orbe en la distancia, con 2:04.55 horas, dejando a un lado el récord mundial conseguido en 1998 por el brasileño Ronaldo da Costa, quien se coronó con 2:06.05 horas imponiendo, hasta entonces, la mejor marca en ese maratón.
Así pues, la prueba de 42.195 kilómetros, que forma parte del World Marathon Major, se antoja una carrera no sólo llena de retos, sino de recuerdos de una nación que alguna vez estuvo dividida y que año con año rememora esos días en que se volvió a unir.
rgs