Centroamérica tiene embajador histórico en Roland Garros

El tenista salvadoreño Marcelo Arévalo (Sonsonate, El Salvador; 17 de octubre de 1990) hizo historia al convertirse en el primer centroamericano en ganar un Grand Slam luego de adjudicarse el título de dobles de Roland Garros 2022 junto a su pareja, el neerlandés Jean-Julien Rojer, quien también tiene vínculo con el continente americano por haber nacido en Curazao, isla del Caribe que es colonia de Países Bajos.

La dupla de Arévalo-Rojer sorprendió a la que estaba formada por el croata Ivan Dodig y el estadounidense Austin Krajicek, por parciales de 6-7 (4/7), 7-6 (7/5) y 6-3, en una final que tuvo poco más tres horas de duración en la cancha principal de la tierra batida parisina, sobre la cancha Philippe Chatrier.

Arévalo ya había hecho historia días antes al conseguir el pase a la última batalla y convertirse en el primer centroamericano finalista de un Grand Slam en la rama de dobles masculinos, pues ya había logrado un subcampeonato en esta categoría pero en la categoría de dobles mixtos, junto a la mexicana Giuliana Olmos, en el US Open del año pasado.

“Esto es un logro personal, pero es también para mi país”, declaró Marcelo Arévalo en la conferencia de prensa posterior a su victoria en las semifinales de Roland Garros 2022, en la que añadió: “Estoy jugando para mucha gente en El Salvador, hay mucha gente que me apoya”.

Envuelto en la bandera de su país, Arévalo mostró una enorme sonrisa sobre la arcilla de París al recibir el título como campeón junto a Jean-Julien Rojer, sustituyendo a los franceses que triunfaron el año pasado en casa, Pierre-Hugues Herbert y Nicolas Mahut.

En esa sonrisa también está inmerso el sacrificio que Arévalo tuvo que hacer desde muy pequeño para poder llegar a ser un tenista élite y consagrarse en un Grand Slam. Su gusto por el tenis empezó desde los siete años gracias al impulso de sus padres, quienes también se dedicaron a este deporte, pero dado que no eran una familia de recursos prominentes, tuvo que ajustarse a varias precariedades para seguir avanzando.

En una entrevista con ATP Tour, Arévalo recordó que hubo una ocasión en la que su comida fue atún en lata y pan, ya que los recursos en ocasiones no eran suficientes mientras jugaba al tenis fuera de casa. “No podíamos darnos el lujo de ir a un restaurante a comer pasta o carne, pero siempre comíamos. Muchos tenistas han pasado por lo mismo también, especialmente de nuestra región. No la tenemos fácil, pero eso da fuerza”.

De la misma forma, relató que tenía que hacer grandes viajes en camión para trasladarse a México o Costa Rica con tal de continuar con su preparación en el tenis, hasta que finalmente pudo establecerse en la Universidad de Tulsa y radicar en Florida ya como tenista profesional.

“Esto ha sido desde el esfuerzo que hacían mis padres de llevarme de Sonsonate para San Salvador a entrenar una vez a la semana; luego, dos veces; luego, tres, hasta que me fui a vivir a San Salvador con mi hermana. Por eso, sé que ha sido un esfuerzo de muchísimos años y significa mucho para mí”, recordó en una entrevista al diario salvadoreño Cancha en febrero de 2021.

Ahora puede presumir una estrella importante no solo para él, sino para toda su región natal: “Tuvimos suerte de sacar este partido y somos muy afortunada de haber ganado y estar viviendo esto. Quiero agradecer la atmósfera que se vivió en este estadio y agradecer a todos los involucrados en Roland Garros desde los jueces hasta los recogepelotas. Gracias, París, y gracias, Roland Garros”, mencionó el salvadoreño en su discurso de premiación.

La de Roland Garros 2022 fue la novena final del ATP Tour para Marcelo Arévalo en dobles, pero la primera de nivel de Grand Slam (sin contar los dobles mixtos). Otras siete fueron disputadas a nivel 250 y una más a nivel 500, teniendo títulos en Los Cabos, Winston Salem, Dallas y Delray Beach. Este año había sido subcampeón del Abierto de Acapulco, cayendo junto a Jean-Julien Rojer frente a la dupla de Feliciano López y Stefanos Tsitsipas.

Según lo que tenía planeado en su agenda, luego del título que logró en Roland Garros, Marcelo Arévalo había planeado participar en el Libema Open de Países Bajos, que es el torneo de arranque de la temporada de hierba que termina en Wimbledon, pero, sobre la hora, el tenista decidió viajar a El Salvador para disfrutar el título con su gente.

El Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES) también confirmó que hará un acto en su honor en el Anfiteatro del Museo Nacional de Antropología (MUNA), además de que la Asamblea Legislativa le entregará el reconocimiento como Hijo Meritísimo de El Salvador, según lo anunciara el presidente del órgano legislativo, Eduardo Castro, marcando la gran historia nacional que emergió de Marcelo Arévalo en Roland Garros.