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Costa Rica abre las puertas a mexicanos
México enfrenta a los costarricenses en el hexagonal, ambos tienen muchas historias que contar, una de ellas es la mano que nos brindan.
Luis Ángel Landín fue de los prospectos más importantes del futbol mexicano, de eso hace casi 10 años. El delantero de 1.82 metros de estatura, fortaleza física y técnica individual lo llevaron a cotizarse en enero del 2008 en 1.8 millones de dólares, el valor más alto de su carrera, con llamados a la selección nacional y con la mira en la clasificación a los Juegos Olímpicos de Beijing de ese mismo año; el futuro prometía para el atacante.
Desde aquella vez, la generación quedó marcada y Luis Ángel, como muchos más, empezó a bajar escalones en la clase social futbolística de nuestro país, de muchos ya no se sabe más, a algunos como Landín, recientemente lo recordamos porque vino hace algunos meses a una gira de su equipo, Herediano, con equipos de segunda división en el estado de Michoacán.
“En México se le da mucho valor al jugador extranjero; entonces, los mexicanos nos sentimos menospreciados en nuestro propio país”, indica Luis Omar Hernández, defensa que participó en aquel partido en Carson, California, y que encontró en la Liga de Costa Rica la terapia anímica, de rendimiento para superar aquella eliminación.
En los últimos cuatro años, 21 futbolistas mexicanos participaron en la Primera División de Costa Rica. Nuestro país pasó de no tener representación en el 2014 a convertirse en la segunda nación con más presencia en una liga donde ocho de cada 10 jugadores son nacionales.
El rival de la selección mexicana en la penúltima fecha del Hexagonal Final fue el refugio de jugadores que no encontraron lugar, oportunidades en México, pero que en Costa Rica, además de tener participación, se convirtieron en referentes, líderes de sus clubes. Ellos conocen la estructura de un país que pelea junto a México la supremacía del futbol de Concacaf.
“Buscamos la oportunidad de seguir jugando y dedicarnos a lo que nos apasiona y el motivo de irnos es que nos abrieron las puertas después que desgraciadamente en nuestro país nos la cerraron”, expresa Carlos López, portero de Cafetaleros de Tapachula que jugó un torneo con el club tico Santos de Guápiles.
En Costa Rica actualmente existen cuatro jugadores mexicanos en la liga local, entre ellos Luis Ángel Landín, que el año pasado fue subcampeón de goleo de aquel país. Sin embargo, el país centroamericano está fuertemente influido por el futbol mexicano, los jugadores ven partidos de la Liga MX, le tienen un gran respeto y para muchos su meta y sueño es venir a competir al torneo.
Los futbolistas extranjeros son poco requeridos en Costa Rica, 11% de todos los jugadores de esta temporada no nacieron en el país centroamericano. Los sueldos de los jugadores foráneos son hasta tres veces más altos que el promedio de los jugadores costarricenses y aunque antes del 2010 los mexicanos que llegaban a la liga de Costa Rica eran jóvenes que nunca pudieron debutar en Primera División, que provenían de Tercera y Segunda División, las características de los futbolistas mexicanos en suelo tico ahora incluyen a campeones juveniles, Jorge Hernández, goleadores y exseleccionados nacionales (Luis Landín) y por supuesto muchos jugadores con experiencia en la Liga MX, como Luis Omar Hernández.
“En los últimos dos drafts se registró la cantidad más grande de jugadores que no han conseguido equipo y desgraciadamente es por la regla 10/8 y ahora 9/9, no lo tenemos que ocultar o ignorar, esa regla es la que nos ha dañado”, exclama Carlos López, portero que estuvo en América y Morelia en México.
La Liga de Costa Rica ayudó a Carlos y Luis Omar. El portero rechazó un contrato en San Luis que le ofrecía 10% de su salario anterior. Fueron las épocas cuando el club potosino dejó la Primera División para llegar a Liga de Ascenso. En el caso del defensa, su experiencia en México le ayudó a erigirse como líder de Herediano, ganar títulos y competir en Concachampions.
“Nos sentimos con la capacidad de pelearle a cualquier jugador extranjero que llegue a México, el problema es que también nos dejen competir, porque si te tienen atados de brazos, no te dan oportunidades, llegan a lastimar el autoestima y te sientes menospreciado”, agrega Luis Omar Hernández, que tras dos años y medio en Herediano, regresó este torneo a Necaxa.
El zaguero indica que no sólo es Costa Rica, más jugadores ven con interés las ligas de Centroamérica, como Guatemala, Nicaragua, Costa Rica.
Ahora de regreso a México, se enfrenta con un contexto diferente al que dejó. Casi la mitad de los jugadores en la Liga MX son extranjeros y la competencia se hace más difícil. “Llegar allá y que le den valor al futbolista mexicano, que somos importantes y no tenemos que sentirnos menos que nadie”, señaló Luis Omar.