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Interinato, una tendencia en Latinoamérica
Problemas de planeación en las Federaciones de futbol, inestabilidad, cambios o tiempo para pensarlo bien son algunas razones que tienen a seis Selecciones latinoamericanas con un entrenador interino.
Seis de las ocho selecciones latinoamericanas que participaron en el Mundial de Rusia 2018 —que concluyó el pasado 15 de julio— tienen un entrenador interino y sus directivos no han definido cuándo nombrarán al fijo. Es decir, quien se encargará del proceso al Mundial de Qatar 2022.
México, Costa Rica, Panamá, Colombia, Uruguay y Argentina son los representativos que tienen entrenadores provisionales.
En el caso de la Selección Mexicana, el plan original de Yon de Luisa —presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF)— era renovar a Juan Carlos Osorio en el cargo, pero cuando el colombiano descartó la posibilidad, el plan del directivo cambió para darse el tiempo de nombrar al definitivo.
Según él, es una decisión que vale la pena que se piense profundamente.
Esa misma postura coincide con la de la federación costarricense, explica Joseph Fernández, periodista de la televisora Canal 6 de ese país. El plan original de los federativos centroamericanos era renovar a Óscar Ramírez —el entrenador que dirigió a la selección en Rusia 2018— cuando concluyera la Copa del Mundo. Sin embargo, cuando el equipo no avanzó de la fase de grupos los orilló a despedirlo.
“Los federativos costarricenses buscan un entrenador extranjero para que ayude a los seleccionados, quienes en su mayoría juegan fuera del país, a desarrollar su potencial como lo hacen en sus clubes. Por lo anterior, dicen que por eso están tomándose su tiempo para elegir al técnico adecuado. Según ellos, cuentan hasta con ocho candidatos”, explica.
Tanto la FMF como la costarricense no tenían un plan alternativo en caso de que sus seleccionadores originales no continuarán con el cargo y por ello tuvieron que nombrar a Ricardo Ferretti y Ronald González —quien es el entrenador de la sub 20 de Costa Rica— como entrenadores interinos de sus respectivas selecciones.
La situación que viven ambos representativos contrasta, por ejemplo, con los de España, Polonia, Islandia e, incluso, Egipto. Estas federaciones también se quedaron sin técnico después de la Copa del mundo, pero todas nombraron casi inmediatamente a su sustituto con el que afrontarán el proceso a Qatar 2022.
Fernández cree que esto se debe a que en Europa existen técnicos mejor preparados y que ahí existe mayor facilidad de que esas selecciones los contrasten, mientras que Pilar Velásquez —periodista de la radiodifusora RCN colombiana— opina que esto se debe a una falta de planificación de las federaciones.
“Al menos en la federación colombiana fue así”, relata Velásquez. “El presidente de la federación sabía que era casi seguro que José Pékerman se iba a ir de la dirección técnica, pero no amarró a Juan Carlos Osorio o Reinaldo Rueda, dos de los candidatos más firmes para tomar el cargo, y ambos se contrataron con otros representativos”.
Velásquez señala que la federación colombiana vive en un panorama de incertidumbre sobre quién ocupará el banquillo de la selección y que lo anterior se suma a los problemas federativos relacionados con sospechas de venta de boletaje ilegal.
“Ambas situaciones afectan para que no se tuviera a estas fechas al sustituto de Pékerman”, añade.
Los cambios en el organigrama de los federativos son otros de los factores por los que algunas de estas selecciones no tienen un entrenador fijo, como es el caso de Uruguay y Panamá.
Tanto la Asociación Uruguaya de Futbol como la Federación Panameña de Futbol estarán en un proceso de elecciones, por lo que ambos organismos prefirieron nombrar a técnicos provisionales para enfrentar sus dos partidos amistosos de este mes y que la nueva dirigencia elija al nuevo entrenador.
En el caso de Uruguay, menciona Jorge Señorans —periodista del diario Referí de ese país—, es probable que renueven a Washington Tabárez, mientras que en Panamá no hay candidatos y se prevé que lo elijan hasta enero próximo, una vez que las elecciones se lleven a cabo.
Argentina, por su parte, sufre las consecuencias de su crisis deportiva y federativa.
En los últimos cuatro años, el equipo tuvo a cuatro entrenadores y su federación fue intervenida en el 2016 por la FIFA por la crisis institucional que el país padeció como consecuencia del escándalo de corrupción en sus elecciones presidenciales.
Sólo Brasil, con Tite, y Perú, con Ricardo Gareca, son las únicas selecciones latinoamericanas que participaron en el Mundial de Rusia que tienen a un técnico fijo. Y fueron los mismos que los calificaron a la pasada Copa del Mundo.