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Liga MX Femenil, en la paradoja entre fichajes y estabilidad
Esta semana inicia una nueva temporada con la incursión de refuerzos de élite internacional, aunque en el fondo permean deudas de seguridad laboral y garantías contra la violencia de género.
Un nuevo torneo de la Liga MX Femenil está en puerta. A partir de este viernes, el certamen número 13 en la historia de este circuito dará inicio con Tigres defendiendo su corona con garra total, luego de los fichajes rimbombantes de las delanteras Jennifer Hermoso, Alison González y Thembi Kgatlana.
No sólo Tigres hizo eco en el mercado de fichajes, también Rayadas con la incorporación de la seleccionada de Países Bajos, Merel Van Dongen, así como Mazatlán FC con las sudafricanas Hildah Magaia y Sinoxolo Casale, además de otros movimientos de figuras nacionales como Mariana Cadena al América, Viridiana Salazar a Chivas, Dinora Garza a León y Norma Palafox a Bravas de Juárez.
Aunque el mercado siga sumando estrellas internacionales, en el fondo la Liga MX Femenil mantiene otras deudas fuera de la cancha en cuestiones esenciales como la estabilidad laboral y las garantías de seguridad contra la violencia de género, algo que resaltó en las últimas semanas de 2023 pero se viene arrastrando desde el inicio del circuito.
“Algo que será una constante en la Liga MX Femenil en 2024 y años venideros son las deudas que tienen en cuanto a la protección de las jugadoras tanto a nivel contractual como en cuestiones de violencia de género (…) Hay muchas situaciones de acoso tanto sexual como laboral para las jugadoras y allí es donde la liga sigue quedando a deber, porque a nivel futbolístico sigue creciendo, pero se ve desbordada por otras situaciones que debía atender desde el inicio y que hasta ahora quieren hacer ojos ciegos para ello”, explica a El Economista, Adrianelly Hernández, periodista, investigadora y académica especialista en futbol femenil desde hace más de una década.
Antes de concluir 2023, dos temas saltaron al escrutinio público: en noviembre, el Senado de la República aprobó una reforma de ley que exige un salario base igualitario para hombres y mujeres en el deporte profesional en México.
En diciembre, el medio Proceso exhibió a Jorge Gómez, ex entrenador de Necaxa Femenil, enviando mensajes de acoso y violencia de género contra jugadoras de su plantel. Unos días después, el club rompió su relación con este personaje, pero nunca hubo una versión al respecto por parte de la Liga MX Femenil.
“Mediáticamente, la liga ha crecido mucho, está entre los tres primeros lugares a nivel mundial en cuanto a posicionamiento, pero está en uno de los lugares no muy presumibles en cuanto a condiciones laborales y de protección de jugadoras. Hay mucha opacidad en temas que deberían tratarse con claridad. Se dijo, por ejemplo, que cuando existiera una situación de denuncia como la de Jorge Gómez se iba a socializar con el resto de clubes para que esto no vuelva a ocurrir, pero no se sabe nada al respecto”.
Paradójicamente, la liga sigue anunciando fichajes internacionales que elevan su reputación. Merel Van Dongen ha disputado tres Copas del Mundo con la Selección de Países Bajos (2015, 2019 y 2023), además de dos Eurocopas (2013 y 2022) y unos Juegos Olímpicos (2021), además de militar en equipos como Ajax y Atlético de Madrid.
La sudafricana Hildah Magaia fue campeona de la Copa Africana de Naciones 2022 y nominada a mejor jugadora africana de 2023. Ahora junto a su compatriota Sinoxolo Casale, con quien disputó el Mundial 2023 de Australia-Nueva Zelanda, espera ayudar a que Mazatlán FC salga de los últimos lugares de la tabla.
Ellas se unen a la etiqueta de lujo de la española Jennifer Hermoso, quien llegó a Pachuca en verano de 2022 y a partir de este 2024 intentará extender el legado ganador de Tigres; otras extranjeras de prestigio este año son la también española Andrea Pereira en América y la colombiana Catalina Usme en Pachuca.
“Es una ola que no se va a detener, para las extranjeras la liga mexicana es atractiva porque, no importa del país que vengan, van a ganar más que las mexicanas, además, porque está considerada una liga profesional, no semiprofesional como en muchos países de Latinoamérica, donde no todas las jugadoras tienen contrato en los equipos”, destaca Adrianelly Hernández.
De acuerdo con la especialista, el salario mínimo para una jugadora mexicana en la Liga MX Femenil oscila entre los 8,000 y 9,000 pesos mensuales, mientras que para una extranjera, aunque no sea de un gran cartel, ronda los 20,000.
“Es algo contradictorio, porque si bien es una liga atractiva, todavía tiene deficiencias que le pegan en específico a la jugadora mexicana. Tener extranjeras es correcto para crecer la competencia, sin embargo, hay un vicio en todos los equipos de creer que sólo por ser extranjeras son mejores que las mexicanas. Hay muchas cuestiones que se deben analizar tanto a nivel liga como en la especificidad de cada equipo, ojalá se hicieran más cosas para darle mayor protección sobre todo a las jugadoras mexicanas, porque la liga se vendió desde el inicio como un semillero de Selección Nacional y se está quedando corta en ese sentido”.
El torneo Clausura 2024 de la Liga MX Femenil comenzará este viernes 5 de enero con el duelo entre Querétaro y Juárez, mientras que la final de vuelta está programada para el 27 de mayo. Tigres y América fueron las últimas finalistas, con las regias ganando su sexto título.