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Warriors se impuso y apela ?a las estadísticas

El 71% de las veces que un equipo gana el quinto juego de las finales, se lleva el título.

Dicen que en 71% de las ocasiones, el equipo que logra la victoria en el quinto juego de las finales de la NBA es el ganador del título de la liga. Si las estadísticas se cumplen, entonces se podría ya pensar que Golden State Warriors, el equipo liderado por Stephen Curry, será el que levante el trofeo Larry O’Brien, luego de su triunfo por 104-91 ante Cleveland Cavaliers, la segunda diferencia más alta en lo que la va de la serie.

Curry lideró a los de Golden State al sumar 37 unidades, siete rebotes y cuatro asistencias, en colaboración con Draymond Green, quien aportó 16 puntos, mientras que Andrés Iguodala se unió a la causa al encestar 14 unidades.

Ayer, Warriors mostró una mejor cara que en juegos anteriores, y llevó a la desesperación a unos Cavs que ni siquiera con la figura de LeBron James fueron capaces de remontar en la parte final del partido.

Eso, aunque LeBron fue más acertado que Curry, al encestar 40 puntos contra los 37 del MVP de la temporada. Pero sin duda, en conjunto, la ofensiva de Golden State se vio más consolidada y desde el segundo cuarto, mostró que estaba dispuesta a poner la serie a su favor, que ahora mismo se encuentra 3-2 para ellos.

El primer cuarto concluyó con el marcador 22-22, mientras que la diferencia para el segundo periodo fue de solamente un punto. El descanso les vino bien a los locales, quienes buscaron aprovechar el apoyo en casa y tras la pausa del entretiempo sacaron cinco puntos de ventaja.

Acaso el último cuarto fue el que tuvo más contundencia por parte de Warriors, que no aflojó el paso y logró una diferencia de siete unidades que los de Cleveland simplemente ya no pudieron remontar.

Con todo y que James intentó dar su mejor esfuerzo, 40 puntos, 14 rebotes y 11 asistencias, mientras que Tristan Thompson colaboró con 19 unidades y J.R. Smith se agenció 14 puntos, nada de eso fue suficiente para que Cavs lograra la remontada ante los inspirados Warriors que habían mostrado su ímpetu en el cuarto juego de la serie.

El siguiente encuentro de las finales se disputará el próximo martes en el estadio Quicken Loans Arena, casa de Cavaliers y, de ser necesario, el viernes se jugaría el partido definitivo en Oakland. Veremos si las estadísticas tienen razón o no.

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