Xolos, menos delincuencia y más derrama económica

Xolos ha sido un remedio para una ciudad que hasta hace cinco años había sido golpeada por la violencia. Con el nacimiento del club se creó un vínculo con los tijuanenses, se generó una química perfecta , se fortaleció la economía de la plaza y hasta los índices de la delincuencia disminuyeron, asegura para El Economista Ignacio Palou, director deportivo del equipo fronterizo que a la distancia recuerda cómo era la plaza que ya ha adoptado como suya.

Todo eso ha logrado Xolos en apenas cinco años de vida, tres torneos en Primera División y dos liguillas con la que empezará a jugar hoy tras un torneo en el que concluyó en el segundo sitio con sólo una derrota en 17 semanas.

No nada más en lo deportivo han llegado los éxitos, ya que, según un estudio del Comité de Turismo y Convenciones de Tijuana, entre junio del 2011 y junio del 2012 el equipo dejó una derrama económica de 1,000 millones de pesos.

Palou no oculta el pasado del lugar en el que se siente feliz. Fue una ciudad golpeada, pero desde el 2007 o el 2008 es un lugar pasivo. Realmente tenemos una imagen en el resto del país diferente a lo que acontece en Tijuana. Me parece que para el tema futbolístico es una sede muy tranquila, en la que el profesional de este deporte se puede desarrollar de la mejor manera , destacó el exguardameta, quien aseguró que en cinco años ha sido testigo de una grata transformación que hoy permite que él sea un enamorado de la ciudad .

De acuerdo con cifras oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Tijuana, obtenidas por este diario, desde que Xolos juega en la ciudad, a la fecha, la delincuencia ha disminuido en 28 por ciento. Los datos son contundentes, mientras que en el 2007 se reportaron 6,076 incidentes, en el 2012, la cifra alcanzó los 4,005.

El directivo comenta que en Tijuana todo es diferente, y que así como en la ciudad existe una mezcla de gente nacida ahí y muchas más personas que no, pero que se sienten como en casa y luchan por darle la mejor cara a la plaza, en el club que se fundó en el 2007 también hay situaciones peculiares.

Primero, como equipo nacimos diferente, es como esos partos en agua, su concepción se dio de otra manera. La franquicia, el nombre, la ciudad, todos, intentos que hubo de gente de futbol que no lo pudo lograr (tener un equipo en Primera División), y nosotros en cuatro años, afortunadamente y gracias al esfuerzo de los jugadores principalmente, y también de los cuerpos técnicos que nos acompañaron para lograr el ascenso, hoy podemos hablar de otro Tijuana .

A la distancia, Palou saborea que atrás quedaron esos tiempos en los que el club daba sus primeros pasos en el profesionalismo y la gente en las calles de Tijuana no sabía si eran basquetbolistas, beisbolistas o futbolistas. Se ha creado una identidad con base en valores cotidianos muy importantes, destacando la humildad, la pasión, el coraje, la entrega y la lucha; entonces, es muy similar a lo que vive el tijuanense.

Llevamos cinco años y me parece que la gente se arraigó perfectamente a nuestra identidad y nosotros a la de ellos, entonces somos como la química perfecta .

Hoy, Xolos vive un romance con su afición, con una Liguilla y Copa Libertadores en puerta, pero Ignacio Palou sabe que deben trabajar todos los días para fortalecer ese lazo. Realmente lo que pasó con nosotros se da poco en el futbol, entonces somos los primeros que tienen una conciencia muy grande y sabemos que a esta gente hay que cuidarla, a esta región hay que ofrecerle un espectáculo amplio, de calidad; tenemos los pies en la tierra .

Si bien en Tijuana tienen una visión a largo plazo, la realidad es que a partir de esta noche buscarán dar un paso a las semifinales ante Monterrey, aunque siempre con fidelidad a los valores de la institución, siendo humildes, sabedores que, como en la vida, el futbol es una rueda de la fortuna y hay que buscar que, como a nosotros, nos acompañe con base en el trabajo , concluyó el directivo del cuadro fronterizo.

carlos.herrera@eleconomista.mx