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Ingresos tributarios, con el peor avance
El incremento en el precio promedio de exportación y la depreciación del peso ayudaron a los ingresos petroleros.
Los ingresos que obtiene el gobierno federal a través del cobro del Impuesto sobre la Renta (ISR), el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) registraron el crecimiento más bajo en lo que va del sexenio para un primer semestre.
De acuerdo con el informe trimestral de finanzas y deuda pública, en los primeros seis meses del año, se recaudaron 1.4 billones de pesos, lo que apenas significó un crecimiento de 0.1%, respecto al mismo periodo del 2016.
En el primer semestre de gobierno de la actual administración (2013) estos ingresos presentaron un avance de 15.3 por ciento. En el 2014, cuando entró en vigor la reforma fiscal, crecieron 12.7%, mientras que en el 2015 se incrementaron en 28.8% y el 2016 se elevaron a 10.7 por ciento.
Lo anterior se debió principalmente a una reducción de 27.4% en la recaudación del IEPS a gasolina y diesel que de enero a junio presentaron una recaudación de 110,026 millones de pesos, mientras que en los primeros seis meses del 2016 fue por 143,613 millones de pesos.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) expuso en diversas ocasiones que, ante el estímulo fiscal que se estaría dando en los precios de los combustibles, la recaudación por IEPS se vería afectada, lo que a su vez se vería reflejado en un menor avance de la recaudación total.
Si bien se tuvo un crecimiento casi nulo en la recaudación, el pago de impuestos que hacen más de 56 millones de contribuyentes logró financiar 58% del gasto neto del sector público que llegó a 2.5 billones de pesos.
ISR e IVA dan más al fisco
La recaudación por ISR creció 3.6%, respecto del primer semestre del 2016, con un total de 834,124 millones de pesos. Este avance también es el más bajo que se haya registrado desde el 2013 en un periodo similar.
Con respecto al IVA, el gobierno registró una recaudación de 399,955 millones de pesos, un incremento anual de apenas 1.3 por ciento. El año pasado este gravamen presentó un crecimiento de 5.3%, respecto de lo que se observó en el 2015.
El IEPS general que se cobra a diferentes productos como comida chatarra o bebidas saborizadas tuvo una reducción de 15.5% en términos reales y respecto a lo registrado en el primer semestre del 2016, con un total de 189,891 millones de pesos. Ello se debe a la disminución que se percibió en la recaudación por IEPS a combustibles.
Petróleo aporta 16% del gasto
De enero a junio, los ingresos petroleros aportaron apenas 16% del gasto neto del sector público con un total de 413,792 millones de pesos. Sin embargo, este monto significó un incremento de 24.5% respecto de lo que se registró en los primeros seis meses del 2016.
Esto obedece al incremento en el precio promedio de exportación de la mezcla mexicana de petróleo y a la depreciación del tipo de cambio, de 49.9 y 5.8%, respectivamente, y respecto al mismo periodo del 2016 , explicó Hacienda en un comunicado.
De esta manera los ingresos presupuestarios del gobierno federal se ubicaron en 2.6 billones de pesos, un incremento real de 7.6%, respecto del primer semestre del 2016. Este monto es superior en 477,203 millones de pesos a lo previsto en el programa.
Este resultado se debe al buen desempeño de la recaudación tributaria, así como al remanente de operación que se recibió por parte del Banco de México , destacó Hacienda.