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Súperpeso jugó en contra de los ingresos públicos
Fortaleza cambiaria afectó en lo captado por el IVA en exportaciones, así como en los ingresos petroleros.
Entre enero y diciembre del año pasado, los ingresos presupuestarios sumaron 7 billones 39,148 millones de pesos
La apreciación del peso frente al dólar en el 2023 le jugó en contra a los ingresos públicos, que si bien lograron un crecimiento modesto, quedaron por debajo de lo aprobado en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF), de acuerdo con los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Entre enero y diciembre del año pasado, los ingresos presupuestarios sumaron 7 billones 39,148 millones de pesos, lo que representó un crecimiento de 1.0% en comparación con lo captado en el 2022.
Si bien los ingresos públicos observaron un crecimiento anual en el 2023, resultaron 84,325 millones de pesos por debajo de lo aprobado en la LIF, que es mayor, por ejemplo, a todo el presupuesto ejercido por el Poder Judicial, de 74,695 millones de pesos, y al presupuesto ejercido por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, de 53,009 millones de pesos.
Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), señaló que los menores ingresos captados se debieron al súper peso, el cual tuvo su efecto en lo captado por el IVA en exportaciones, así como en los ingresos petroleros.
“Sin embargo, derivado de la gestión fiscal que hemos realizado, los balances, que es lo que determina la sostenibilidad fiscal de las finanzas públicas, se mantienen en línea con lo que habíamos planteado al Congreso de la Unión con una pequeña desviación. Entonces, esto pensamos que va a ser bien tomado por los mercados”, contestó Yorio al ser cuestionado sobre la captación menor a la esperada.
Tributarios y petroleros quedaron a deber
Al interior del informe de la Secretaría de Hacienda se observó que hubo una menor captación de lo esperada de los ingresos petroleros y tributarios, pese al aumento sustancial que hubo en estos últimos.
Los ingresos que se obtuvieron por el pago de impuestos de los contribuyentes, la principal fuente de financiamiento del presupuesto, sumaron 4.5 billones de pesos, lo que representó un crecimiento anual de 12.4 por ciento. Sin embargo, quedaron 102,984 millones de pesos por debajo de lo aprobado en la LIF.
En el caso de los ingresos petroleros, se captaron 1.07 billones de pesos, esto significó una caída de 31% anual, y fueron 238,662 millones de pesos menos a lo aprobado.
La recaudación por concepto de Impuesto sobre la Renta (ISR), que es el que más ingresos le representa a la federación, aumentó 4.6% en términos reales, a 2 billones 506,331 millones de pesos.
“El crecimiento del ISR es consecuencia directa del crecimiento económico, pues la economía creció 3.1% y los ingresos por vivienda subieron más de 4 por ciento. Además, en segundo lugar hubo cambios a la Miscelánea Fiscal que permitieron una mayor recaudación”, agregó Víctor Gómez Ayala, jefe de Analítica de Datos del Imco.
En tanto, los ingresos por IVA, el segundo que más recursos deja al erario, incrementaron 6.0% a 1 billón 366,582 millones de pesos, mientras que el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) fue el que más creció el año pasado, con un alza anual de 258.9%, para un total de 445,101 millones de pesos en ingresos, esto gracias a que se redujeron considerablemente los estímulos sobre el IEPS a las gasolinas que se dieron en el 2022.
En el caso de los ingresos petroleros, se captaron 1.07 billones de pesos, lo que representó una caída de 31% anual, y fueron 238,662 millones de pesos menos a lo aprobado.