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El Empresario

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3 de cada 10 empresas carecen de una estrategia de reputación clara

Una buena reputación atrae talento, incrementa la confianza del consumidor y atrae inversión; sin embargo, aun se requieren estrategias de implementación.

El 45% de las empresas carecen de una práctica de gestión de reputación online.Shutterstock.

La reputación en las organizaciones mejora la credibilidad y confianza de los consumidores e inversionistas y aunque 90% de las empresas dice que es un tema muy importante, su gestión aun es un reto, pues se requiere impulsar las estrategias.

El estudio “Gestión de la reputación corporativa en México: evolución y alcances  (2015-2022)” desarrollado por EGADE Business School y JeffreyGroup señala que 30% de las organizaciones entrevistadas carecen de una estrategia de reputación clara y el 40% desconoce los indicadores para medir la reputación.

Mariela Pérez Chavarría, investigadora del Tecnológico de Monterrey dice que las organizaciones no tienen identificados los riesgos de carecer de una gestión de reputación, tampoco se cuentan con políticas de comunicación online, para actuar en caso de presentar un ataque a la imagen corporativa.

“Los riesgos están ahí, y en un segundo se puede caer el trabajo que hemos hecho durante muchos años”.

El estudio realizado a 102 organizaciones y nueve directores generales destaca que 62% de los participantes, considera a la reputación de máxima prioridad; 28% como un tema que se atiende constantemente; 8% que solo en ocasiones; mientras que para el 1% no es relevante, y otro 1% dijo que se atiende poco.

Subestiman la importancia de la lealtad

Pérez destalla que una buena reputación trae diversos beneficios como atraer talento, destacar entre otras organizaciones, reducir el impacto de una crisis, incrementar la lealtad de los consumidores y aumenta las inversiones.

Sin embargo, las organizaciones dicen que la lealtad y legalidad no son relevantes, pues las ponen en última posición, mientras que la gestión de talento y riesgos, la innovación y comunicación se colocan en las primeras posiciones.

“Una conducta ética es necesaria para tener una buena reputación; sin embargo, hay desconocimiento y un entendimiento falso de qué es la reputación (...) Está demostrado que una compañía con buena reputación es una compañía honesta, congruente, entre los valores que tiene, lo que hace y dice”, destaca la investigadora.

CEOs impulsan la estrategia

Aunque los directivos son conscientes de los beneficios, porque a nivel mercado tiene un impacto económico, aun se requiere que las políticas permeen en toda la organización y la cultura de reputación sean transversal.

“El 87% de los entrevistados piensa que el líder es coherente y comprometido, pero solo 74% lo ve activo y comprometido con la comunidad. Asimismo, 64% dice que se necesita más tiempo y recursos para la gestión de la reputación corporativa”.

Principales retos

Incorporar la evaluación de riesgos, crear un área responsable y eliminar los silos que impiden los avances de una buena reputación son los principales retos que enfrentan las organizaciones.

Mauricio Gutiérrez, presidente y socio fundador del Círculo de Reputación Corporativa y Embajador del Corporate Excellence dice que se pensaba que no se tenía la necesidad de gestionar una reputación porque no se tenía problemas al respecto, pero a lo largo de los años las organizaciones se han sensibilizado y apostado por ello.

Para Gutiérrez existen retos principales: el primero es pasar de la estrategia a la acción, es decir no solo diseñar un plan de reputación, sino implementarlo.

El segundo es diseñar un modelo de medición y el tercero es la congruencias de los CEOs, entre lo que dicen y hacen.

Pérez añade otro reto, la gestión de la reputación online, debido a que la apertura de datos, la transparencia y la amplia difusión de la información, hacen más visibles las acciones que toman las compañías y los usuarios cada vez están más interesados por conocer el actuar de las compañías.

Además, el 45% de las empresas carecen de una práctica de gestión de reputación online, por ello es necesario identificar riesgos reputacionales en línea (ciber amenazas), establecer políticas de comunicación online y capacitar constantemente a los colaboradores.

Editora El Empresario. Periodista especializada en emprendimiento, pymes, creación de negocios, management y liderazgo. Desde el 2017 coordina El Empresario

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