Beneficios del código de barras en tu pyme

Si Tienes un negocio y buscas crecer los canales de comercialización y llevar tus productos a los retailers, el código de barras es un elemento que deberá tener tu producto.

El código de barras, además de contener la información de tu producto, es un requerimiento en la mayoría de las tiendas. Incluso es necesario para vender los productos en algunos e-commerce, porque permite tener un monitoreo de la mercancía.

Aunque puede pensarse que es un elemento sólo para las grandes empresas, la realidad es que trae muchos beneficios para las pequeñas y medianas (pymes), como estandarizar procesos, conocer el stock y tener mayor control de los productos.  

Juan Pablo Gómez, Director de Desarrollo de Productos y Servicios de GS1 México destaca en entrevista, que los códigos de barras son un requisito necesario para llegar al retail o exportar, además es una tecnología económica, “un lector 2D empieza desde 380 pesos, el equivalente a dos hamburguesas”.

También ayuda a tener procesos más rápidos, pues si se genera la propia codificación se puede perder tiempo en diseñarlo y capacitar al personal, así como evitar el error humano en el inventario.

Otro beneficio es en el pago en tienda porque se reducen filas y aumentan las ventas, así como la facilidad en el seguimiento de información: fechas de caducidad o los lugares de fabricación de los productos.

Gómez detalla que los procesos del retail se hacen alrededor del código de barras; desde conocer el inventario, recibir una orden de compra y despachar la mercancía, así como la devolución y procesos de inventarios cíclico, que se usa para saber si hubo robo de mercancía.

“De no adoptarlo, te estás alejando de las buenas prácticas empresariales y está siendo más difícil competir contra otras empresas. Si no lo usas estas comprometiendo procesos empresariales y poniendo en desventaja el negocio”.

La evolución del código de barras

Existen diversos códigos de barras: el lineal y el QR, elemento que han evolucionado. Ahora las empresas apuestan por códigos que brinden al cliente mayor información y experiencia, como los que usan aplicaciones que permiten acceder a la página de la empresa y conocer más del producto.

Gómez destaca que este tipo de sistema también ayuda a conocer la trazabilidad porque permite compartir la historia del producto. “Por ejemplo; si vendes un café y quieres mostrar la finca en la que se cultiva, las manos que recogieron el grano y qué está dentro del empaque que te estás bebiendo esa mañana. Ese tipo de historias las puedes contar”.

¿Cómo generar un código?

Para generarlo solo se necesita la descripción del producto, fotografía (opcional), contenido neto del producto, categoría y nombre de la marca.  Una vez que se recopila la información, el proceso demora 10 segundos y entra a una base de datos internacional que cuenta con más de 200 millones de productos.

Los microemprendedores pueden empezar con 10 códigos, que responden a las variantes de los productos y renovar la licencia cada año calendario.

“Una vez que empiezas, el siguiente paso es generar los demás para los empaques secundarios”.

No uses imágenes genéricas

Gómez recomienda no usar las imágenes que existen en Internet, pues pertenecen a otras empresas y suelen complicar la logística, lo ideal es general el propio código de barras que lleve las especificaciones del producto.

“La problemática (de usar un código de Internet) radica en que ese le pertenece a otra empresa y otro producto, pero la gente lo adopta y lo pega a su producto y manda a hacer su producción. Cuando llega con los retailer o e-commerce, les dicen que el producto existe, lo cual lleva a las empresas a rehacer la producción y perder tiempo”.

Por ello es importante no ver el código de barras como una imagen y sí como un elemento que ayuda a gestionar el inventario y crecer el negocio.