Terminar con el estigma de la salud mental, el reto de las organizaciones

A raíz de la pandemia las empresas han puesto mayor atención en el bienestar físico y emocional de los colaboradores, de hecho 66% de las empresas en Latinoamérica ya están abordando el riesgo de salud mental, según el estudio Riesgos de Personas 2022 de Mercer Marsh; sin embargo, aún persiste un estigma alrededor de la salud mental, que las empresas deben combatir.

La salud mental sigue considerándose, por gran parte de la población, como un asunto vergonzoso, por ello los colaboradores prefieren ocultarlo, es así que el 50% de quienes piden permiso para ausentarse prefieren decir que es por problema de gastritis, colitis o migraña, antes que decir que es por estrés o ansiedad, revela la plataforma Cuentame.

Cómo revertirlo y normalizar el decir: “me siento estresado”, “estoy cansado”, “tengo depresión”, sin que se asocie con debilidad. Para lograrlo, las organizaciones requieren establecer políticas de bienestar y crear una cultura de confianza, sobre todo dotor a los líderes de herramientas para detectar los riesgos a los que pueden estar expuestos los empleados de manera integral, sobre todo poner el ejemplo.

“Debe existir este compromiso por cuidar de la salud y el bienestar de la gente. No podemos decir que promovemos la salud y el bienestar de la gente cuando nosotros como líderes somos los que mandamos correos fuera del horario de trabajo, esperando respuestas, o cuando hacemos llamadas fuera del horario de trabajo, cuando no somos claros con la comunicación que tenemos con nuestro equipo de trabajo”, comentó en entrevista Ariel Almazán, líder de consultoría de Salud en Mercer Marsh Beneficios.

En el marco del Mundial de la Salud Mental que se conmenorta el 10 de octubre, Almazán precisó que hoy se saber que la salud y bienestar de la gente no es algo aislado, que se trata solo en un consultorio, sino existen políticas que las compañías pueden establecer para prevenir y tratar estos padecimientos que experimentan 56% de los colaboradores en Latinoamérica.

“Nos preocupa que la salud mental se considere como un problema de la pandemia, y que los empleadores sientan que han cumplido al agregar un programa de asistencia al empleado o realizar una campaña contra el estigma. La necesidad de atención consistente a la salud mental sigue siendo un desafío en todo el mundo”.

De acuerdo con Almazán, el diseño de los programas de salud mental varía de una cultura a otra, pero existen factores que pueden abordar:

• Uso de datos para entender las necesidades de su fuerza laboral.
• Programas a la medida de los diferentes tipos de población en la plantilla, y su exposición al riesgo y las consecuencias de la salud mental
• Revisión de proveedores actuales en función de los datos recabados
• Reducir el estigma: los empleadores deben dotar a los gerentes y supervisores con habilidades que les permita identificar señales tempranas, y sepan canalizarlos hacia estos programas y los expertos correctos.

Los colaboradores quieren sentirse escuchadas, que su bienestar es importante para la empresa, por ello contar con líderes que pongan atención en su bienestar y salud, que empatice con ellos y ponga el ejemplo es importante para terminar con el estigma de la salud mental.