Lectura 7:00 min
Altán busca ganar espectro de 2.5 GHz, tal como el que tienen Telcel y AT&T
Altán Redes está a contrarreloj para acceder a bandas de capacidad para robustecer y evolucionar su red de telecomunicaciones al 5G. La opción es la banda de 2.5 GHz que todavía se encuentra disponible, para comercializar productos 5G en el consumo masivo y redes privadas, y también para rentarlo a terceros, y con ello no perder competitividad ante Telcel y AT&T que ya venden servicios 5G y que por si fuera poco, además de 2.5 GHz en su poder, ya cuentan con banda de 3.5 GHz también.
A Altán Redes, la empresa público-privada que administra el espectro de los 700 MHz a través de la Red Compartida de servicios mayoristas, se le agota el tiempo para ser una entidad financieramente rentable y para iniciar con la comercialización de productos telefonía e Internet móviles, e inalámbricos fijos de capacidad 5G.
En noviembre de 2022, Altán Redes se autoimpuso el objetivo de que para antes de septiembre de 2024 alcanzaría el punto de equilibrio financiero, y que para entonces ya estaría en posibilidad de conseguir más bandas radioeléctricas para atender el tráfico de los usuarios que usan su red, esto luego de que en una anterior subasta de frecuencias Altán declinó ir por más espectro por un problema de presión financiera.
La empresa se dijo en ese noviembre de 2022 con un colchón de al menos 18 meses antes de pensar en la venta de un producto 5G, pero hoy está a 120 días de anunciar cuál de esos dos objetivos logró.
Altán, un operador con 130 clientes minoristas que revenden Internet de calidad 4G-LTE a 13 millones de personas en México, ha manifestado un interés por adquirir licencias de espectro en la banda de los 2500 Megahertz o de 2.5 GHz. Este es un espectro considerado a nivel mundial entre los más idóneos para crear productos de 5G para las empresas, el gobierno y para el consumo masivo; y tramos de esa misma banda ya los poseen AT&T y Telcel a nivel nacional y regional en México.
A nivel México, AT&T explota el 57% de las frecuencias de 2.5 GHz que ya están asignadas, y Telcel detenta el 43% restante, pero todavía quedan disponibles 40 Megahertz de esas frecuencias y con alcance nacional que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) llevará a concurso en los siguientes meses para quien las quiera comprar.
Altán Redes tiene motivos para querer poseer frecuencias de 2.5 GHz y el contexto de la tenencia espectral en México se ha ido presentando favorable a sus intenciones, sobre todo por las devoluciones de esas mismas frecuencias que desde el año 2020 hizo Telefónica Movistar por su propia realidad de mercado y porque ahora el Instituto Federal de Telecomunicaciones estudia la creación de nuevas regiones celulares, que a su vez permitirían la configuración de nuevos mecanismos de asignación de espectro a tamaños de cobertura y contraprestaciones económicas más accesibles para los operadores.
Si Altán Redes consigue espectro en los 2500 Megahertz podría agregar valor a su red de telecomunicaciones. En materia técnica, Altán evolucionará su red a un nuevo nivel de capacidad para atender el tráfico en zonas densamente pobladas como la Ciudad de México.
Y en criterio comercial, sus clientes, entre los que se encuentra BAIT de Walmart, el operador móvil virtual de mayor tamaño en México, ya podrán salir al mercado anunciando paquetes de datos con calidad 5G y con precios agresivos, a los que Telcel y AT&T tendrían que responder, de ahí que Telcel hoy se opone abiertamente a la creación de las nuevas zonas celulares como una vía para que Altán acceda a la banda de 2.5 GHz.
Altán también podría, con espectro de 2.5 GHz ya en sus manos, salir al mercado, principalmente al sector productivo, y convencer a los industriales de que ya cuenta con la capacidad de proveer soluciones de redes privadas, por ejemplo, en minería, industria automotriz, energía, puertos y transporte terrestre, donde Telcel y AT&T ya han comenzado a ganar contratos.
“La banda de 700 MHz de Altán, al ser una banda de cobertura, puede tener una gran complementariedad con una banda de capacidad (…) En los despliegues a nivel internacional se ha visto una complementariedad entre las bandas de 700 MHz y de 2.5 GHz para brindar capacidad adicional. En el caso de Altán, contar con una banda con esas caracterícelas como la de 2.5 GHz, haría de su portafolio una banda de cobertura, pero también con una de capacidad y eso puede ser muy bueno en entornos urbanos donde hay más conexiones por área”, dijo Jesús Romo, analista en la firma de consultoría en telecomunicaciones Global Data.
“Uno de los principales retos es que se están incrementando las conexiones de los operadores móviles virtuales que están con su tráfico sobre la red de Altán, por lo que entonces el tema de la capacidad se vuelve una premura y se deriva la pregunta de si la capacidad que tiene Altán es suficiente para atender a sus clientes y los nuevos que van a llegar. Es así como la banda de 2.5 GHz ampliaría esa capacidad y mejoraría la capacidad para alojar más conexiones en áreas donde los operadores móviles virtuales están creciendo”, dijo Romo.
A la pregunta de qué más tendría entre manos Altán en su intención de ir por el trozo de banda de los 2500 Megahertz que aún quedan en el IFT, está el hecho de que la concesión de la banda de 2.5 GHz sería mediante una figura jurídica diferente a aquella a través de la que explota el espectro de los 700 MHz, pues esa es una banda que en la práctica usa Altán, pero que es vigilada por el Promtel y tiene diversos candados para que Altán no le dé un aprovechamiento ajeno al que establece el marco regulatorio.
Los títulos de concesión por los que se han entregado otros bloques de espectro en la banda de 2.5 GHz permiten a sus tenedores, ahora Telcel y AT&T, a ponerlos a disposición de terceros a través del llamado mercado secundario de espectro. De hecho, fue así como Telcel obtuvo su banda de 2.5 GHz de manos de MVS Comunicaciones.
Poner la banda de 2.5 GHz en el mercado secundario ya siendo un concesionario de ésta, permitiría a Altán Redes generar más dinero en momentos de que el actual gobierno y principal fondeador de la Red Compartida llega a su fin, después de todo se desconoce si la 4T será eterna y cuando la misma directiva de Altán Redes dijo a este medio en una declaración anterior que los planes de la compañía van encaminados a que la Red Compartida “no le cueste más dinero al erario”.
Ir al mercado secundario, planteó Romo, sería posible. “Si va a ser por un concurso público, un permiso especial o con qué tipo de condiciones regulatorias (para que Altán acceda al 2.5 GHz). Sí puede ser una opción, si no hay impedimento de la autoridad y si Altán quiere arrendar ese espectro, parte de sus frecuencias, además de evolucionar sus redes”, platicó Jesús Romo, de Global Data.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones ya anunció que va al mercado con los lotes de espectro de 2.5 GHz y ahora analiza las ventajas de entregarlo a los concesionarios interesados mediante las 300 Áreas Parciales de Servicio o APSs.
Si la autoridad concreta este plan, entonces Altán Redes y otros proveedores estarán en posibilidad financiera real de comprar bandas en mercados que hagan sentido a sus planes de negocio.
Así, por ejemplo, Altán podría ir por un 2.5 GHz con cobertura en APSs de espíritu industrial donde ofrecería producto de Internet de las cosas (IoT) a las empresas, pero también por un 2.5 GHz en regiones desatendidas para rentarles esas frecuencias a micro operadores que no tuvieron el músculo financiero necesario para comparar las frecuencias, pero sí el suficiente para atender una localidad en particular.