Alza de arancel en Brasil ayuda a México

El incremento que impuso Brasil de 30 puntos porcentuales del Impuesto a Productos Industrializados (IPI) a los automóviles importados beneficiará a México, quien está excluido de esa medida.

La industria anticipa que no habrá mayores impactos y nosotros creemos que las exportaciones mexicanas seguirán creciendo en el mercado brasileño , dijo Guido Vildozo, director para Latinoamérica de la división Automotriz de IHS Global Insight.

México es el tercer proveedor de automóviles para pasajeros de Brasil, con ventas por 1,036 millones de dólares de enero a agosto del 2011, superado por Argentina (2,748 millones de dólares) y Corea del Sur (1,572 millones de dólares).

A tasa anual, las exportaciones mexicanas de autos mostraron un mejor desempeño en esos ocho meses, al subir 41.4%, mientras que las de Argentina crecieron 26.8% y las de Corea del Sur 31.9%, según datos del Ministerio de Desarrollo de Brasil.

En el 2005, las ventas mexicanas a Brasil apenas eran de unas 5,000 unidades y subieron hasta cerca de 100,000 unidades en el 2010.

El mercado más dinámico hasta el momento es el de Latinoamérica, el año pasado creció casi 100% y arriba de 60% este año, y es hoy el destino de 14.5% de nuestras exportaciones totales , dijo Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

La medida de Brasil afectará sobre todo a las exportaciones de Alemania, Japón y China, que son el cuarto, quinto y sexto proveedor. Particularmente, las exportaciones de China registraron un crecimiento de 683.8% de enero a agosto del 2011.

Monitoreo

A finales de septiembre, la Secretaría de Economía informó que se encuentra en comunicación con las autoridades de Brasil, con el fin de que las condiciones de acceso al mercado automotor brasileño no se modifiquen en perjuicio del sector exportador mexicano.

A través del Acuerdo de Complementación Económica No. 55 (ACE 55), los automóviles comercializados entre México y Brasil no pagan aranceles desde el 2007.

Otra ventaja de México está en que las cuatro principales ensambladoras establecidas en Brasil (Volkswagen, General Motors, FIAT y Ford) también tienen operaciones en el territorio mexicano. El mercado brasileño importó automóviles para pasajeros por 7,353 millones de dólares de enero a agosto del 2011, un alza de 45.2% a tasa anual.

Las principales empresas afectadas serían las asiáticas y europeas que no tienen inversiones en Brasil, aunque algunas, como la japonesa Nissan y la china JAC, han hecho anuncios para establecer plantas ahí.

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