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En camino a un turismo sustentable y responsable con el medio ambiente
Las principales iniciativas se trabajan en los 11 complejos diferentes con los que cuenta la cadena hotelera en México.
Nuestro compromiso con un turismo responsable nos guía hacia un viaje transformador. El éxito en la aplicación de nuestra visión requiere un enfoque 360, que integra la sostenibilidad en todos los procesos, al adaptarnos a las necesidades de la naturaleza y mitigar los riesgos”.
Gloria Fluxà, vicepresidenta y chief sustainability officer de Grupo Iberostar.
Actualmente, hemos vivido una serie de consecuencias medioambientales debido a nuestro impacto perjudicial en el planeta. Algunas de ellas son el cambio climático, las crisis hídricas, así como las emisiones de dióxido de carbono, generadas por la industria. Por esta razón, resulta urgente comprometernos en nuestras acciones para contrarrestar nuestra huella negativa.
De acuerdo con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, el turismo es una de las principales actividades económicas del país al generar una importante derrama económica. Es por esto que uno de los retos del sector consiste en modificar nuestros patrones de consumo hacia destinos o complejos más responsables con nuestro entorno ambiental.
En línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas, Grupo Iberostar, multinacional española con más de 65 años de experiencia en el sector turístico, ha decidido promover un modelo de negocio turístico más responsable, en el que la sostenibilidad sea el motor de su estrategia de negocio.
Por tal motivo, ha implementado medidas conscientes para garantizar que las vacaciones contribuyan positivamente al planeta. De tal manera que el grupo tiene una hoja de ruta estratégica, basada en las siguientes acciones:
• Estrategia de descarbonización: tiene como objetivo conseguir la neutralidad de carbono para el año 2030.
• Transición a energías renovables: aspira a reducir el consumo de energía, así como las emisiones en los hoteles de la cadena. Asimismo, tiene un programa de restauración de arrecifes, manglares y dunas costeras en el Caribe. Por ejemplo, en 2023 trabajaron con ocho viveros de corales y una estación de investigación en el Complejo Playa Paraíso, con el objetivo de monitorear el estado de los arrecifes.
• Primer Centro de Innovación: con base en la iniciativa Wave of Change, se enfocan en la consecución del Objetivo 14 de los ODS: Vida submarina, por lo que utilizan de forma sostenible los océanos, mares y los recursos marinos.
• Departamento 3R: tienen la meta ambiciosa de ser una empresa libre de residuos para 2025 al implementar las 3R: reducir, reutilizar, reciclar. Por ejemplo, impulsan la economía circular.
• Equipo dedicado: cuentan con un equipo de 251 empleados, quienes identifican, miden e implementan las 3R.
• Innovación y compromiso: Iberostar continuamente piensa en estrategias vanguardistas para la consecución de sus metas ambientales.
• Sistemas Winnow: en alianza con Winnow Solutions, en las cocinas de Iberostar, poseen máquinas con inteligencia artificial que sirven para reconocer con exactitud qué se tira, qué se ahorra y cómo se pueden tomar mejores decisiones para evitar la sobreproducción de alimentos en los buffets y que éstos se tiren. Así, en 2023 se ha evitado el desperdicio de casi 922,000 kg de comida orgánica, lo que supone una reducción del 11.79 por ciento.
Asimismo, en nuestro país, ha alcanzado un 100% de consumo responsable de pescado. Esto significa que el marisco servido en los hoteles Iberostar en México proviene de fuentes responsables. Además, respetan el periodo de veda de las especies marinas. Estas decisiones mejoran la salud de los océanos y apoyan a las comunidades pesqueras locales.
Como sociedad, tenemos el deber de ir transformando nuestras acciones para proteger, cuidar y restaurar nuestro entorno. Por lo tanto, apoyar a empresas que en su ADN busquen impulsar cambios ambientales positivos puede ser un primer paso.
El objetivo de descarbonización de la organización es lograr emisiones cero 20 años antes del objetivo global. Los últimos datos revelan una reducción a nivel global. Específicamente, estos esfuerzos han llevado a una reducción del 6% en la región AME, y en el caso de México, esta reducción ha sido de un 26 por ciento.