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Generación distribuida, en zona gris de iniciativa de reforma eléctrica
Rocío Nahle, secretaria de Energía, afirmó que el gobierno federal seguirá incentivando la generación eléctrica in situ, pero la propuesta legislativa no establece los términos; en el pasado la CFE ya se había quejado por el régimen aduciendo pérdidas.
Aunque se pretende que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tenga control absoluto en la conducción de todas las actividades del sistema eléctrico nacional, incluida la generación, la generación distribuida que se realiza a pequeña escala, menor a 0.5 megawatts cercana al sitio de consumo principalmente mediante techos solares, podrá continuar e incluso crecer, dijo la secretaria de Energía, Rocío Nahle, aunque la iniciativa de reforma constitucional del presidente Andrés Manuel López Obrador no lo dejó claro.
“Los paneles solares en casa habitación; edificios; pozos de agua; núcleos rurales, etc. Se denomina ‘generación distribuida’ y desde el inicio de este @GobiernoMX se ha promovido su uso y financiamiento a través @fidemx. La #ReformaElectrica no plantea eliminar esto, al contrario”, twitteó la titular de Energía.
Este tipo de generación se multiplicó en más de 8,000 veces en una década en el país, llegando a 975 megawatts instalados mediante 12,893 contratos firmados, por lo que es una de las rutas de crecimiento de las energías renovables y su marco legal no ha tuvo ninguna modificación por parte de la actual administración antes de la reforma a los artículos 25, 27 y 28 Constitucionales.
Según datos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), al cierre del año pasado la tecnología solar fotovoltaica mediante techos solares en hogares, pequeña y gran industria, lidera por mucho la penetración en generación distribuida, con el 99.28% de los contratos, el resto incluyen eólica, biomasa, biogás e hidroeléctricas.
Así que de 0.003 megawatts instalados con un contrato en 2007, la capacidad se multiplicó por 223 en tres años, llegando a 0.67 megawatts instalados mediante 231 contratos. Y así, una década después, en México hay 129,893 contratos firmados para una capacidad total de 975 megawatts totales de generación distribuida. Esto corresponde ya al 1.1% de la capacidad instalada a nivel nacional, cuando hace una década era de 0.001 por ciento.
“La transición energética se desarrolla en este tipo de tecnología intermitente, que colocando paneles en los hogares beneficia directamente al usuario. El ahorro de energía se refleja en ahorro económico familiar”, reiteró Nahle este miércoles.
Sin embargo, la propuesta enviada por el presidente López Obrador establece la cancelación de contratos de compraventa de energía eléctrica entre privados y la CFE, mismos que serán sustituidos por mecanismos de adquisición que diseñará la CFE.
“Conforme a lo dispuesto en los artículos 25, 27 y 28 constitucionales de este Decreto, se constituye al Estado en el responsable del Sistema Eléctrico Nacional, por lo que el mismo día de la entrada en vigor del presente Decreto, se instala dicho sistema en los términos siguientes: Los permisos de generación eléctrica otorgados y los contratos de compraventa de electricidad con el sector privado, se cancelan, así como las solicitudes pendientes de resolución”, según el texto que fue turnado a Comisiones de la Cámara de diputados y que representantes de Morena planean que quede aprobada en dos meses.
Antecedente problemático
Cabe recordar que en marzo de 2017 se publicaron en el Diario Oficial de la Federación las disposiciones con los nuevos modelos de contrato que los usuarios pueden utilizar para la producción de energía solar en instalaciones menores a 500 kilowatts, pero en abril, la filial Suministrador Básico de la CFE interpuso un amparo contra estas reglas asegurando que el esquema provocaría pérdidas para la empresa. El amparo fue turnado a un tribunal especializado en competencia económica y devuelto a un tribunal administrativo, ante el cual la CFE se desistió en el segundo semestre del 2018, lo que despejó el camino para la instalación de techos solares bajo las nuevas reglas.
Así, se pueden implementar los tres esquemas legalmente establecidos para la autogeneración de electricidad en el país: el net metering en que se devuelve como energía lo que se inyecta a la red; el net billing, en que se paga en efectivo a precio marginal local el excedente que se inyecta a la red, y la venta total de energía, con que algunos productores que no requieran el consumo podrán inyectar toda su electricidad a la red y recibir los respectivos pagos. En todos los casos, interviene la CFE en la firma de los contratos bilaterales.
¿Cómo funciona la generación distribuida?
Este esquema convierte en “prosumers” (consumidor que también produce) a los usuarios de la CFE con instalaciones menores a 500 kilowatts instalados mediante tres esquemas:
Net metering
• Con un solo medidor, se hace balance de energía al final del bimestre y el usuario paga por el consumo o cobra excedentes entregados a la red.
• A Precio Marginal Local promedio. El primer pago de excedentes se hace después del primer año de medición, en forma de energía que se deja de pagar.
Net billing
• Mediante dos medidores independientes se paga el consumo y se cobra generación.
• A Precio Marginal Local por horarios, el cobro por la energía entregada es en efectivo.
Venta total
• Con un solo medidor, no hay consumo y se le cobra a la CFE toda la generación que se le entrega. A Precio Marginal Local por horarios, el cobro a la CFE será en efectivo.