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Pemex gana autonomía presupuestaria y operativa
Nueva ley faculta a estados petroleros a establecer impuesto adicional, así como una especie de predial a instalaciones de nuevos operadores.
A pesar de que la reforma fiscal que se está llevando a cabo en Petróleos Mexicanos reducirá en una buena medida los ingresos del Estado, esta caída será compensada con los ingresos obtenidos de todos los nuevos impuestos creados para este año, dijo Juan Bueno Torio, diputado del PAN.
Los ingresos no se verán afectados si se mantienen las actuales condiciones, si no se cae el precio del petróleo o si no se reduce la producción, se mantienen seguros. Se mantiene sin cambio el ingreso del gobierno, en igualdad de circunstancias no habrá problemas para el gobierno , dijo.
Esa es una de las claras ventajas con la reforma fiscal de Pemex. De entrada, se gana una total autonomía en su operación y hay una mayor transparencia con el fondo petrolero manejando los ingresos derivados de la venta de petróleo.
En el caso de los estados, y de los ingresos del gobierno federal, la meta que se tiene es que al menos se mantengan al principio sus actuales montos, pero conforme lleguen los nuevos operadores éstos se incrementen.
El cambio más importante es que quitamos del presupuesto de egresos de la federación, el presupuesto de Pemex, lo pasamos directamente a las leyes de ambas empresas , explicó.
Por lo pronto, los estados petroleros tendrán la ventaja de cobrar un impuesto especial para los nuevos operadores petroleros, una especie de predial que tendrán que pagar las nuevas instalaciones.
Van a cobrar un impuesto adicional por las actividades de producción y exploración petrolera, van a tener que pagar (los petroleros) por realizar esas actividades; se estima que pueden ser unos 2 mil 200 millones de pesos, por un pago por hectárea de mil 625 pesos cada una , señaló.
El legislador explicó que si en este momento hay una crisis en el gobierno es derivada de la falta de ingresos petroleros, porque no hay producción de petróleo. De hecho, hay una caída en la oferta mexicana de casi 300 mil barriles diarios, que nada tienen que ver con la reforma fiscal de Pemex, dijo.
Los cambios que se han puesto en marcha son acuerdos dentro del Congreso de la Unión y más de uno no tiene el apoyo de la Secretaría de Hacienda. Todos los esquemas están en la Ley de Hidrocarburos, en la Ley de Impuestos Sobre Hidrocarburos y en la Ley de Responsabilidad Hacendaria.