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Reactivación lenta y errática marca a la inversión fija
El indicador ha descendido en tres de los últimos seis meses y en lo que va del año arrastra un retroceso de 10.4% con relación a los primeros 10 meses del 2019.
Durante septiembre la inversión en capital fijo de las empresas mexicanas retrocedió luego de una incipiente racha de mejoras, confirmando que se trata del componente de la demanda agregada con la trayectoria de reactivación más errática.
En dicho mes el indicador cayó 1.6% mensual luego de haber crecido 2.4% y 1.6% durante julio y agosto, respectivamente. En los últimos seis meses ha tenido tres de avances y tres de retrocesos, de acuerdo con las cifras reportadas ayer por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
La dinámica de septiembre se debió a retrocesos en los dos grandes componentes del gasto en capital. Mientras el renglón de maquinaria y equipo se contrajo 1.6%, el de construcción lo hizo 1.5%, arrastrado por el descenso de 4% observado en el rubro de construcción residencial.
“Hasta el noveno mes del año, la variación anual acumulada de la inversión es de 11.2% frente a la caída de 18.3% de 2020. Más aún, su recuperación carece del dinamismo que han mostrado otras variables de la economía mexicana, algo que podría estar influenciado por el contexto local de incertidumbre en sectores clave como el energético y el automotriz”, comentó Marcos Arias, analista del Grupo Financiero Monex en un reporte.
En este mes, el gasto en capital de las empresas mexicanas fue 8.1% inferior en su comparación bianual, es decir, frente a septiembre del 2019 (previo a la pandemia) con lo que el diferencial negativo volvió a ampliarse luego del -7.2% de agosto del 2021.
De forma acumulada, de enero a septiembre la inversión fue 11.2% superior a la del mismo período del 2020, pero 10.4% inferior a la del lapso homólogo del 2019, por lo que se trata del componente de la demanda agregada más rezagado en el proceso de reactivación económica.
“La debilidad de la inversión en México se presenta desde mucho antes de la pandemia, y se debe principalmente a que el entorno no es favorable para hacer negocios. La incertidumbre política y económica han puesto un freno a la inversión desde la cancelación de la construcción del nuevo aeropuerto en 2018, así como otras decisiones del gobierno que han puesto en duda la confianza en las instituciones del país”, opinó el Grupo Financiero Base en un reporte.
A nivel de subcomponentes, el rubro de inversión en equipo de transporte es el de mayor rezago, con una caída de 20.7% durante los primeros nueve meses del año, con relación al mismo período del 2019 pero, de acuerdo con el Grupo Financiero Base este dato podría estar influido por la falta de inventario para satisfacer la demanda de la industria, en medio de la crisis de escasez de semiconductores para el ensamble de vehículos automotores.