Impulsan el consumo sostenible positivo con acciones cotidianas

El Consejo de Administración Forestal, más conocido por sus siglas en inglés FSC, es una organización sin fines de lucro, no gubernamental, independiente, que nació hace 30 años, y surgió debido a una preocupación para lograr un manejo adecuado de los bosques. Así, el FSC establece, como actividad central, una serie de estándares que aseguren que el manejo de los bosques se realiza de manera ambientalmente adecuada, socialmente beneficiosa y económicamente viable. 

En entrevista con Palmira Arnaz, vocera de FSC, explica que los estándares que emplean toman en cuenta el cuidado de los ecosistemas, de la biodiversidad, de los servicios que dan los bosques, pero también del cuidado de las personas que viven en los bosques y que trabajan ahí. También menciona que “un bosque certificado puede garantizar que toda la madera que se extrae está legalmente aprovechada, que cumple con las leyes del país donde está y con criterios muy estrictos que son verificables y transparentes”.

Ahora bien, los bosques tienen un papel central para recuperar los ecosistemas, pues absorben el dióxido de carbono y ayudan en la captación del agua. Por esta razón, FSC organiza la Semana del Bosque, la cual se realiza año con año con todos los participantes de la red global de FSC. El objetivo es ampliar la reflexión sobre el valor que tienen estos ecosistemas en el mundo. En esta iniciativa se realizan actividades para promover la concientización del cuidado de los bosques, además de que se promueve el interés sobre cómo se puede apoyar una gestión forestal responsable.

Además, Arnaz explica que una forma de impactar positivamente en el cuidado de estos ecosistemas es consumir productos que estén fabricados de manera sostenible. Por suerte, FSC ofrece un sello de garantía que certifica que los productos están creados de forma responsable. Actualmente, en México existen al menos 22 marcas que forman parte de esta certificación, además de 270 empresas certificadas en cadena de custodia. Sin embargo, para que este consumo responsable adquiera más relevancia es necesario que los consumidores lo exijan para que esto presione a las empresas.

También señala que “nuestro logotipo garantiza que el material con el que están hechos, ya sea madera, cartón, papel o derivados, provienen de fuentes responsables; es decir, tenemos una trazabilidad prácticamente desde el origen”. El consumo de productos certificados es un agente de cambio cotidiano para la sostenibilidad ambiental. Así, estas acciones colectivas cotidianas pueden lograr un gran cambio a largo plazo en el cuidado medioambiental.