Ciudades de México deben reducir desperdicio en redes de distribución de agua: Cipro

Guadalajara, Jal. Frente a la sequía y los problemas de escasez de agua que enfrentan en mayor o menor medida las ciudades de todo el país, es impostergable que gobiernos e industria implementen soluciones que les permitan un mayor aprovechamiento y menor desperdicio del líquido, afirmó el CEO de la compañía Cipro, Manuel Salas.

En entrevista con El Economista, Salas Flores comentó que las redes de distribución de agua potable en la mayoría de las ciudades en México tienen un 50% de desperdicio en promedio, mientras los estándares internacionales marcan un 25% de agua no contabilizada en la red.

“Digamos, el nivel de las redes en México en promedio, está más o menos en 50%; si logramos aumentar la eficiencia al 75%; es decir, crecer 25 puntos porcentuales, pues esa agua nos va a dar capacidad para dar servicio a una población mayor y/o mejorar los servicios, entonces, hacemos más con la misma agua”, subrayó.

El CEO de la compañía mexicana especializada en proyectos de infraestructura hidráulica, mencionó que, en la mayor parte del territorio nacional, los mantos acuíferos se han sobreexplotado y cada vez, tanto la industria como la agricultura y la población en general, dependen más de del agua de lluvia que ha escaseado a consecuencia del cambio climático.

“Las aguas superficiales tienen el gran problema que tienen una variación por cuestiones climatológicas y con el cambio climático vamos a tener años con mucha agua y muchos años con muy poca agua y eso traerá una situación muy difícil en general”, advirtió. 

Frente a esta situación, dijo, todos los gobiernos, en mayor o menor medida, empiezan a implementar soluciones porque en todas las ciudades hay cada vez menos agua y dependiendo del manejo del líquido en la red, dependerá que sean más resistentes o resilientes frente a la sequía.

“Yo veo un movimiento global dentro de los organismos, unos más y otros menos, pero que están muy preocupados en recuperar agua; lo mismo pasa con la Comisión Nacional del Agua, el Fondo Nacional de Infraestructura, todos apoyando para que se hagan estos proyectos que permitan mejorar la distribución de agua dentro de las ciudades”, destacó el experto. 

Precisó que el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) en Guadalajara y el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (SAPAL), han hecho “esfuerzos importantes” para el mayor aprovechamiento del líquido.

“Nosotros hoy estamos participando en un esquema de planeación y de ingeniería en Los Cabos, lo están haciendo en Querétaro, lo está haciendo Hermosillo, hay un gran movimiento dentro de los gobiernos municipales, estatales y el federal”, puntualizó.

Desarrollo vertical 

De acuerdo con Manuel Salas, el crecimiento de los desarrollos habitacionales verticales en ciudades como la zona metropolitana de Guadalajara, no pone en riesgo el abasto de agua potable como consideran algunas organizaciones vecinales. Por el contrario, explicó, las ciudades que crecen de forma horizontal, demandan redes de distribución de agua potable más extensas. 

“En el modelo europeo de ciudades, lo que tienen son concentraciones más pequeñas porque tienen mucha construcción vertical y eso hace que sus redes sean más pequeñas y de alguna manera sean más controlables”, añadió.

Reconversión de cultivos

En tanto, la reconversión de cultivos tradicionales para producir nopal surge como una propuesta para contrarrestar el impacto de la sequía, hacer más eficiente el uso del agua e incidir en mejorar los ingresos de trabajadores agrícolas de Querétaro. Se trata de una estrategia que el gobierno estatal plantea a productores, para aumentar la productividad del campo.

kg