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Disminuye deuda per cápita de Quintana Roo
La actual administración estatal está comprometida con la responsabilidad y disciplina en el ejercicio de las finanzas públicas.
Cancún, QR. Durante esta administración, el estado de Quintana Roo ha ido disminuyendo su nivel de endeudamiento per cápita.
Al inicio del año 2017, la deuda por habitante la entidad ascendió a 11,549 pesos corrientes, mientras al cierre del tercer trimestre del 2021 descendió a 10,318 pesos, de forma que se ha constatado la reducción del monto de las obligaciones financieras por personas, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Según cifras de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), la administración del gobernador Carlos Joaquín González está comprometida con la responsabilidad y disciplina en el ejercicio de las finanzas públicas, a través de diferentes métricas independientes, entre las que destaca la medición de la deuda per cápita realizada con datos de la SHCP, el avance en el Índice de Calidad de Información y el análisis de la sustentabilidad de la deuda pública.
Sefiplan reportó que el crecimiento proyectado del Producto Interno Bruto (PIB) estatal para este 2022 es de 12.58%, el mayor del país; la tasa de interés promedio real en la que está contratada la deuda estatal de 0.03% en la que se considera la inflación de 7.25% y el saldo de la deuda del gobierno del estado al tercer trimestre del 2021, cuyo monto es de 19,582.2 millones de pesos, en consecuencia, se aprecia que la presente administración no sólo ha logrado contener la deuda estatal heredada, sino que la ha colocado en una senda sostenible.
Además, en materia de transparencia -reflejada en métricas independientes como la realizada por la SHCP- Quintana Roo se ha mantenido en primera posición del ranking nacional del Índice de Calidad de la Información en las mediciones del segundo, tercer y cuarto trimestre de 2021, con calificación perfecta de 100 puntos, añade Sefiplan.
“Hoy Quintana Roo tiene las mejores calificaciones crediticias desde el 2016, con triple B negativo con tendencia Positiva, lo que genera credibilidad”, concluyó la dependencia.