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Retrasan cultivo de primavera-verano
A pesar de que productores están ávidos de sembrar, es riesgoso hacerlo, advierten.
Los productores agrícolas retrasaron el cultivo de la temporada primavera-verano a solicitud del municipio de Querétaro, ante la incertidumbre que permea en el inicio de la temporada de lluvias.
El director de Desarrollo Rural y Agropecuario de la capital, Luis Alberto Muñoz Ramírez, explicó que se ha solicitado a los productores que aguarden hasta junio para iniciar con este proceso de temporal, dado que no hay certeza de cuándo iniciará la precipitación pluvial.
La Comisión Nacional del Agua marcó la temporada de lluvias a partir del 15 de mayo, fecha desde la que se esperaban lluvias atípicas, sin embargo, hasta el momento no se han presentado, expuso el director.
Por tanto, se prevé que sea a partir de la segunda semana de junio cuando empiece la temporada de lluvias. Lo anterior, ante la escasez de lluvias atípicas que se esperaban desde mediados de mayo, así como las afectaciones causadas del fenómeno climático El Niño.
Luis Alberto Muñoz Ramírez dijo que hay agricultores ávidos de iniciar la siembra, pero se corre el riesgo de no lograr la cosecha esperada, ante la variación en la época de lluvias. Agregó que el promedio de las precipitaciones suele ser de 30 milímetros cúbicos.
En el ámbito agrícola, se estima que 85% de los productores son de temporal, por lo que muy pocos cuerpos de agua cuentan con obras de toma para abastecer el riego.
Preocupa abastecimiento
Además, ante los cambios en los ciclos pluviales, la captación de agua en bordos de abrevadero representa una de las principales preocupaciones para el campo.
De 101 bordos registrados por la capital, alrededor de 74% son de abrevadero, de los cuales dependen entre 6,000 y 6,500 cabezas de ganado que representan 25% del total de cabezas reportadas en la capital.
Las presas y bordos se encuentran a 29% de su capacidad, aunque en algunas presas por rehabilitación no tienen agua, en tanto que otras más están a 75% de su almacenaje.
Por ello, se ha exhortado a los productores pecuarios para que lleven a sus animales a zonas cercanas donde puedan ingerir agua, con el objetivo de que no dependan del uso de los bordos.