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Entre risas, China y EU desconfían
Alternadamente, Estados Unidos y China se han abrazado y picado el ojo durante una visita de tres días del secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, en un evento que refleja las crecientes, y a veces contradictorias, ambiciones estratégicas de las dos superpotencias.
Pekín. Alternadamente, Estados Unidos y China se han abrazado y picado el ojo durante una visita de tres días del secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, en un evento que refleja las crecientes, y a veces contradictorias, ambiciones estratégicas de las dos superpotencias.
Ayer, Panetta se reunió con Xi Jinping, el vicepresidente chino que se espera lidere al país la próxima década. Panetta y Xi estrecharon sus manos para las cámaras y proclamaron su compromiso por una relación más estrecha entre Pekín y Washington.
Sin embargo, ese teatral encuentro fue precedido por algunos ejemplos de la desconfianza entre ambas naciones.
El martes, manifestantes rodearon y empujaron un auto que transportaba al embajador estadounidense en China, Gary Locke. Los manifestantes habían hecho desmanes días atrás frente a la Embajada de Japón, molestos por una disputa territorial con Tokio acerca de las islas Senkaku.
Panetta ha instado a ambas partes a resolver pacíficamente el conflicto y reiteró que EU no toma partido en el asunto. Pero alteró los ánimos cuando anunció un acuerdo con Tokio para instalar una estación de radar en el sur de Japón. Panetta insistió en que el radar fue pensado para vigilar a Corea del Norte, pero las sospechas persisten en China, de que también es objetivo del radar.