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Los últimos nazis
Sesenta y seis años después de ocurridos los hechos, Heinrich Boere, un ex SS de 88 años de edad fue condenado a cadena perpetua por la ejecución de 3 civiles en Holanda, en uno de los últimos procesos de criminales de guerra en Alemania.
Aquisgran, Alemania.- Un ex SS de 88 años de edad fue condenado a cadena perpetua por la ejecución de 3 civiles en Holanda, en uno de los últimos procesos de criminales de guerra en Alemania.
Sesenta y seis años después de ocurridos los hechos, el presidente del tribunal, Gerd Nohle, estimó que "los asesinatos fueron cometidos de manera completamente arbitraria" por Heinrich Boere, un SS de origen holandés.
Boere, que vive en Alemania desde hace 55 años y actualmente reside en un asilo para ancianos, fue declarado culpable por el tribunal de Aquisgrán del asesinato a sangre fría de tres hombres.
Se trata de una de las últimas personas juzgadas por hechos que tuvieron lugar durante la Segunda Guerra Mundial.
El proceso más destacado comenzó en noviembre pasado en Múnich contra John Demjanjuk, de 89 años, acusado de complicidad en el exterminio de 27,900 judíos en el campo de Sobibor, en Polonia, en 1943.
Boere ya había sido condenado en ausencia a la pena de muerte por un tribunal de Amsterdam en 1949, que sería conmutada posteriormente por la cadena perpetua. En esa ocasión fue despojado de su nacionalidad holandesa, pero jamás cumplió su pena, porque Alemania se negó a extraditarlo.
En diciembre reconoció haber asesinado a tres holandeses, sospechosos de tener "sentimientos antialemanes" en julio y septiembre de 1944, cuando Holanda estaba ocupada por los nazis.
Según él, los asesinatos de un farmacéutico, un vendedor de bicicletas y un ejecutivo, cometidos en Breda, Voorschoten y Wassenaarn, constituían medidas de represalias contra movimientos de resistencia.
El ex SS afirmó que obedeció órdenes y que en esa época no consideraba haber cometido crímenes. Sin embargo, reconoció que actualmente ve las cosas de otra manera.
Heinrich Boere adhirió a las SS en 1940, a los 18 años. Fue encarcelado poco antes del fin de la guerra, pero se fugó en 1947 y pasó siete años escondido en Holanda antes de instalarse en Alemania, donde trabajó como minero hasta 1976.