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Obama pospone votación en Congreso para atacar a Siria
El Mandatario dirigió un mensaje a los estadounidenses en el que presentó su caso para una acción militar si no se logra un compromiso.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, manifestó ayer que aprovecharía una última apertura diplomática para evitar un ataque en contra de Siria, pero presentó un caso contundente de por qué Estados Unidos tiene que tomar represalias por el presunto empleo de armas químicas si fracasa la diplomacia.
En un discurso televisado a nivel nacional desde la Casa Blanca, Obama recibió con cautela la propuesta rusa de que el gobierno del presidente sirio, Bashar al-Assad, renunciará a todo su arsenal de armas químicas, un hecho que indica que su llamado para un asalto militar en contra del régimen tendría que ser desechado si Al-Assad cumple.
Pero con pocas garantías de que la diplomacia prevalezca, Obama sostuvo que el país debe estar preparado para atacar a Al-Assad. Frente a un público y un Congreso escépticos, el Mandatario cansado de la guerra, afirmó que Estados Unidos todavía lleva acuestas la carga de utilizar su poder militar para castigar a los regímenes que burlan las convenciones que prohíben el uso de armas biológicas, químicas y nucleares.
Si no actuamos, el régimen de Al-Assad no encontrará ninguna razón para dejar de usar sus armas químicas. El propósito de un ataque sería disuadir a Al-Assad de utilizarlas y dejar claro al mundo que no vamos a tolerar su uso , afirmó Obama.
No obstante, el Presidente añadió que tiene una preferencia profundamente arraigada para solucionar los conflictos de manera pacífica, al tiempo que se comprometió a trabajar con sus socios internacionales para negociar con Rusia una resolución en las Naciones Unidas sobre Siria.
El discurso fue la petición de un Presidente que, en un claro desafío a la opinión pública, ha empujado a la nación hacia el uso de la fuerza estadounidense en Siria, así como ha puesto en juego su credibilidad y la del país sobre si puede conseguir que el Congreso lo apoye. Pero eso también significó la conclusión de dos días de intensas negociaciones políticas y diplomáticas en el Capitolio y en el extranjero que parecen haber cambiado sus cálculos sobre la rapidez con la que podía avanzar en Siria.
El Presidente visitó el Congreso en la tarde y pidió a senadores de ambos partidos retrasar la votación de una resolución que le permitiría ordenar ataques en contra de objetivos del gobierno sirio en represalia por el supuesto ataque químico que presuntamente mató a más de 1,400 sirios en las cercanías de Damasco.
Un funcionario de la Casa Blanca afirmó que Obama pasó una hora con cada grupo legislativo, demócrata y republicano, en el Capitolio, revisando la evidencia del ataque químico del 21 de agosto y reiterando su decisión de perseguir un ataque dirigido y limitado que no involucraría a las tropas estadounidenses.
Ante la propuesta rusa
SIRIOS, CON REACCIONES ENCONTRADAS
Beirut. Ayer, los sirios expresaron reacciones encontradas a una propuesta liderada por Rusia para la destrucción de las armas químicas de Siria, a pesar de que los medios estatales y los representantes de la oposición por igual sugirieron que el presidente de EU, Barack Obama, había sido sorprendido mal parado por el movimiento.
El primer ministro sirio, Wael al-Halqi, confirmó que su gobierno apoya la iniciativa de Rusia con el fin de evitar el derramamiento de sangre siria y evitar un conflicto que podría extenderse más allá de la región, informó la televisión estatal de su país.
Por su parte, en un editorial, el diario progubernamental Al-Watan alardeó que Moscú y Damasco le habían quitado a Obama el pretexto para una acción militar.
Sin embargo, la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria expuso en un comunicado que el plan ruso fue otra técnica de estancamiento que sólo le daría el presidente sirio, Bashar al-Assad, más tiempo para causar muerte y destrucción . (A. Ramadán y L. Morris)