Lectura 2:00 min
Candidatos van por voto latino a ritmo de Bad Bunny
Washington. Donald Trump y Kamala Harris multiplican los mítines en Pensilvania con la mira puesta en el electorado negro y en los casi 580,000 latinos con derecho a voto en este estado que no se puede encasillar como republicano o demócrata.
En Pensilvania el 53.4% son puertorriqueños, el 12.6% de origen mexicano, el 11.3% dominicano, el 3% cubano y el 2.6% colombiano, según la plataforma de datos Latino Data Hub.
Los equipos de campaña intentan atraer al cantante puertorriqueño Bad Bunny, cuyo apoyo, según algunos estrategas, puede ser más decisivo que el de la megaestrella Taylor Swift, quien respaldó a Harris.
Puede influir en la preferencia de los condados en declive del este de Pensilvania, un estado que forma parte del llamado cinturón del óxido, golpeado por la decadencia industrial de las últimas décadas.
También puede ser de ayuda el cantautor Billy Joel, que puso letra a las penurias de los trabajadores despedidos de las fábricas de la región, estima Sandoval-Strausz, profesor de historia y director del programa de estudios latinos en la Universidad Penn State.
Los demócratas se han llevado la mayoría de los votos latinos a nivel nacional, pero van perdiendo terreno por Trump.