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Bajan 31% los contratos a favor del peso en futuros de Chicago

La incertidumbre política de la semana pasada se reflejó en el peso que se depreció 2.37% frente al dólar; el viernes rebotó el tipo de cambio para beneficio de la moneda.

La confianza de los inversionistas de Chicago en el peso se redujo significativamente. Los especialistas tienen claro que el catalizador de la incertidumbre en el país es el tipo de cambio peso-dólar. Lo anterior se reflejó la semana pasada en el Chicago Mercantile Exchange (CME).

En el CME se compran futuros a favor o en contra del peso frente al dólar. Desde abril pasado en que había 139,700 contratos de inversionistas que “apostaban” a que el peso se fortalecería, la confianza en la moneda mexicana viene a la baja.

La semana pasada las apuestas bajaron de 50,100 contratos a 34,600 contratos a favor del peso mexicano, un descenso del 31 por ciento. La caída más pronunciada se presentó en la semana del 24 de junio cuando los contratos en el mercado de coberturas pasó de 119,000 contratos a favor del peso el 14 de junio a 50,300 contratos, una caída del 57% en la apuesta a favor del peso.

En las operaciones electrónicas del domingo, el peso se vendía en 19.2047 unidades por dólar, frente al cierre del viernes de 19.0718, lo que representó una depreciación de 0.70% o 13.29 centavos.

La aversión al riesgo de los inversionistas presionó al peso que perdió 2.37% frente al dólar la semana recién concluida. La divisa estadounidense se vendió en 19.0718 pesos, lo que llevó al peso a ser la moneda más depreciada en la semana.

Powell salvó la semana

El evento que tuvo la mayor atención fueron las palabras de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal estadounidense, dadas durante el arranque del simposio de bancos centrales en Jackson Hole, Wyoming.

El funcionario dijo que la Fed está lista para iniciar un ciclo bajista de las tasas de interés en septiembre. Pese a la depreciación de la moneda mexicana frente al dólar en la semana, concluyó el viernes con un rebote tras la racha negativa que provocó la incertidumbre legislativa local, que fue parcialmente contrarrestada por la política monetaria estadounidense que se espera sea más laxa.

El tipo de cambio cerró la última sesión hábil de la semana en 19.0708 pesos por dólar, una mejora de 2.10% respecto del día previo. El avance fue el mejor para un solo día desde el 20 de mayo de 2020.

Aunque el peso tuvo un día positivo el viernes, no fue suficiente para rescatar una semana que terminó con una baja de 2.37 por ciento. Sin el alza del viernes, la semana habría sido la peor (4.4%) desde la primera de junio, cuando el peso cayó más de 7% tras las elecciones en México.

Gabriela Siller, directora de Análisis de Banco Base destacó varios puntos por las cuales la moneda mexicana perdió frente a la de Estados Unidos. Entre ellos se encuentran una probable aprobación de las reformas constitucionales que afectarían el marco jurídico, lo que afectaría también las inversiones de las empresas.

Felipe Mendoza, analista de Mercado del broker ATFX comentó que a lo anterior se sumaron otros elementos como la inflación reportada en México. La inflación anual, reportada en la primera quincena de agosto fue del 5.16%, lo que representa una perspectiva débil para el peso, dijo.

También apuntó que los comentarios en Estados Unidos por parte de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal sobre la posibilidad de una baja en las tasas de interés, afectó positivamente al peso.

Tras un jueves lleno de datos, como una inflación que siguió en la ruta de moderación y un crecimiento económico que confirmó la desaceleración largamente anticipada para el año, el viernes los operadores solo incorporaron la balanza de pagos.

Dentro de la balanza, la Inversión Extranjera Directa que llegó a México cayó 41% en el segundo trimestre del año a su menor nivel en dos décadas para periodos iguales, mostrando nuevamente la mayor debilidad en el apartado de nuevas inversiones.

Las declaraciones de Powell encajaron con la perspectiva del mercado de que el primer recorte de tasa llegará en septiembre, una posibilidad a la que la Fed mostró apertura desde su decisión de julio.

Aunque el mercado está casi seguro de un recorte de tasas en septiembre, de acuerdo con el seguimiento de CME Group, seguirán buscando pistas sobre la magnitud del movimiento y la velocidad de las siguientes decisiones, por lo que el tema monetario no descansará.

Gabriela Siller también destacó que los bancos Morgan Stanley y Citigroup modificaron sus criterios para invertir en México y cambiaron su recomendación de “sobreponderar”, respectivamente debido también al fortalecimiento del yen y por la incertidumbre de la reforma al sistema judicial mexicano.

Morgan Stanley ajustó a “subponderar” las recomendaciones para invertir en renta variable en México y argumentó la reforma del Poder Judicial como motivo del ajuste  y consideraron que elevará el riesgo de México y limitará la inversión en capital. Citigroup removió su recomendación de “sobreponderar” al peso, debido al fortalecimiento del yen y por la incertidumbre acerca de la reforma.

El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, declaró que la elección directa de jueces es un gran riesgo para la democracia en México y amenaza la relación comercial histórica que se ha construido. También el embajador de Canadá, Graeme Clark, mencionó que hay preocupación entre inversionistas de su país. Ambos comentarios contribuyeron con el nerviosismo del mercado respecto a México.

La reforma para la eliminación de organismos autónomos también eleva el nerviosismo. Pese a que el jueves se especuló la posibilidad de que su discusión fuera aplazada indefinidamente, el viernes se llevó a cabo la discusión en la Comisión de Puntos Constitucionales y fue aprobada en lo general, quedando pendiente la discusión de reservas en la próxima legislatura. (Con información de Infosel)

eduardo.huerta@eleconomista.mx

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